tag:blogger.com,1999:blog-363104492024-03-18T10:15:10.707+01:00Apuntes de FilosofíaUna aproximación sencilla al interés humano por la historia del pensamiento, la ética y la metafísicaelHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.comBlogger223125tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-69537065632868349972021-02-14T21:59:00.001+01:002021-02-14T22:06:49.056+01:00Diálogos de Platón (VI): "Gorgias"<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgrdb26r6UrpsQ9k7uEVcA8-zty3_QdmcWvbof-xKDh8E9AJuNRHgMEk20_KpHwdz1xZUIreVi_7LwcuEIzpFsOKOJIbWV3qA9oN6aCUG4JpziafQ16qEncgw-O1tK11MQbnv5d/s300/Gorgias-Platon-md.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="300" data-original-width="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgrdb26r6UrpsQ9k7uEVcA8-zty3_QdmcWvbof-xKDh8E9AJuNRHgMEk20_KpHwdz1xZUIreVi_7LwcuEIzpFsOKOJIbWV3qA9oN6aCUG4JpziafQ16qEncgw-O1tK11MQbnv5d/s0/Gorgias-Platon-md.png" /></a><br />
<span style="font-family: georgia;"><br /></span><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><i><b>Gorgias </b></i>es el cuarto diálogo más extenso de toda la obra platónica. Con <i>Gorgias </i>se inicia el grupo de diálogos que se consideran "<b>de transición</b>" (junto con el <i>Menón</i>, <i>Eutidemo</i>, <i>Crátilo </i>y <i>Menexeno</i>). Seguramente este diálogo fue escrito por Platón hacia el año 387 a. de Cristo, tras su primer viaje a la isla de Sicilia, justo el mismo año en el que funda la <i>Academia</i>. Hay bastantes referencias en el diálogo a Italia y a la misma Sicilia. A causa de ese primer viaje, en los escritos platónicos empiezan a recogerse temas pitagóricos, como el de la preexistencia o la inmortalidad del alma.</span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">E. R. Dodds ha considerado al <i>Gorgias </i>como <b>el diálogo más moderno de toda la obra platónica</b>. Y no es de extrañar, dado que se analizan en él todas las entrañas y características del poder político, cuya esencia, salvando las diferencias a causa de las épocas respectivas, es siempre la misma. Además, se puede seguir sin problemas aún careciendo de toda formación filósofica.</span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-family: georgia;"><span style="font-size: medium;">Posee una <b>estructura distinta</b> a la empleada hasta entonces por el sabio ateniense, puesto que ya no se trata de un interlocutor principal que dialoga con Sócrates, sino que contiene intervenciones consecutivas de Gorgias, Polo y Calicles; y durante la intervención de cada uno de ellos, el resto permanece mudo. Cada una de las intervenciones se construye asumiendo que en la previa se ha cometido un error: así, Polos rectifica a Gorgias, aunque ambos caen en contradicciones.</span></span></div><div><span style="font-family: georgia;"><span style="font-size: medium;"><br /></span></span></div><div><span style="font-family: georgia;"><span style="font-size: medium;">Un aspecto destaca en este diálogo especialmente, y no es su rigor lógico o su estructura, sino el <b>entusiasmo y la pasión con que está escrito</b>. En los diálogos iniciales, tras el proceso a Sócrates, Platón escribe con tranquilidad, comedidamente, como con resignación ante la injusticia comedida y su inevitable consecuencia. Pero aquí nos encontramos con un Platón de cuarenta años que ya acumula unas experiencias personales y vitales diferentes a las de su primera época. La pasión con que escribe, según algunos,<b> puede ser debida a su deseo de defender, nuevamente, a su malogrado maestro</b> (tras haberlo hecho en la Apología, por supuesto). El retórico Polícrates había escrito toda una obra de acusación a Sócrates, y puede que Platón volviera a verse en la necesidad de combatir sus afirmaciones. Sin embargo, <b>es más probable</b>, como señala Guthrie, que la motivación fuera <b>el desengaño de Platón ante la acción política de su tiempo</b>. No en vano vivió la guerra del Peloponeso, el desastre de la expedición a Sicilia, el regreso de Alcibíades y la revolución de los Cuatrocientos... además de la misma ruina de Atenas tras el año 404, el gobierno de los Treinta y la reinstauración de la democracia en Atenas, con Trasíbulo y Trásilo, que condena a Sócrates a beber la cicuta en el 399 a. de Cristo. Recordemos, de pasada, que Platón aborrecía la democracia, personificada en Pericles, a quien aborrece aún más, y que aseguraba que la democracia llevaba a la tiranía. Además, su primer viaje a Sicilia estaba lleno de ilusión y esperanza en la posibilidad de instaurar allí su régimen de absolutismo ilustrado, pues ilustrado era el tirano que dirigía dicha polis, y que decía conocer los escritos de Platón. Pero la realidad, dura e insuperable, le desengañó por completo. Quizá esté ahí el motivo de la fogosidad que destila el Gorgias.</span></span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Desde antiguo este diálogo lleva consigo el<b> subtítulo de "Sobre la retórica"</b>, y aunque ya entonces hubo quien pensó que era más una charla sobre lo justo y lo injusto, dada la importancia de la retórica en la vida atenienses (nadie que no fuese un buen retórico estaba en condiciones de entrar en política), en la cual era una necesidad y una aspiración personal, parece claro que ese subtítulo encaja bien en la intención del diálogo.</span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">En efecto, pues aunque el pueblo era el que tenía la última palabra, ésta se basaba en la capacidad de persuasión del orador. Si uno poseía una retórica hábil y eficaz, se convertía en un político poderoso. <b>El prestigio lo ofrecía la retórica</b>. Pero Platón no era partidario de esto: consideraba que la política se envilecía con la retórica, y por eso atacó a aquella a través de ésta. L<b>a actividad política, según nuestro filósofo, no puede realizarse más que dentro del ámbito moral</b>, porque la política es una parte integral de la moral. Más todavía: no hay mejor ni más efectivo modo de ejercer una moral social auténtica que por medio de la política. Es por ello que el objeto que se persigue en <i>Gorgias </i>es, llanamente, analizar los principios morales que llevan al bienestar político.</span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Pero Gorgias, el político, asume y afirma que el orador, el retórico, conoce lo justo y lo injusto. Pero cuando el gran historiador Tucídides se refiere a los grandes hombres, no lo hace más que valorando sus realizaciones políticas, no la moran <i>en</i> la política. Por ello, <b>la oratoria, el poderoso instrumento de la política, está al margen de conocer qué es lo justo y lo injusto</b>.</span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">La acción del diálogo transcurre seguramente en algún gimnasio, poco después de que el filósofo sofista (por tanto, orador) Gorgias terminara uno de sus discursos. A la charla se unen Polo y Calicles, como hemos mencionado. Dado que Gorgias es un afamados sofista retórico, Sócrates le cuestiona acerca de <b>cuál es la naturaleza de esa misma retórica</b>, el objeto del arte que él profesa. El sofista le contesta que es un arte, en efecto, tan excelso que es capaz de convencer a un enfermo de que acepte un tratamiento más que al propio médico que lo prescribe. La retórica es persuadir, por medio de la palabra, para que la asamblea o un jurado adopte una decisión política particular. La retórica persuade acerca de lo justo y lo injusto, según Gorgias. Pero Sócrates le insta a decidir si <b>la retórica genera una persuasión que da lugar a la creencia o la ciencia</b> (es decir, hacia lo posiblemente falso, como es una creencia, o hacia lo verdadero, que siempre es la ciencia). Gorgias reconoce que es una persuasión que produce, tan solo, la creencia. Por tanto, el orador puede persuadir más que el experto, aunque sepa mucho menos que él. Respecto a aquello que es justo e injusto, se da la misma circunstancia: ¿será mejor el orador que aparentemente posee el saber de diferenciar un hecho justo de otro injusto, o aquel que realmente lo posea? Gorgias se ve obligado aceptar lo segundo. Sócrates concluirá que quien conoce lo justo es justo, y que nunca obra de forma injusta. Si un orador obra injustamente, esto es, si orienta a alguien sabiendo que lo dice es injusto o falso, entonces el orador, y la retórica en su totalidad, debe ser duramente criticada. </span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-size: medium;"><span style="font-family: georgia;">A continuación es Polo quien entra en la conversación. </span><span style="font-family: georgia;">Y realiza una afirmación sorprendente: afirma que <b>el hombre injusto es feliz</b>, una sentencia que, comprensiblemente, anima y excita el tono del diálogo. Polo está en contra de la afirmación socrática de que </span><span style="font-family: georgia;">el mayor mal es el de cometer una injusticia. Y cita a Arquelao, que cometió numerosos crímenes y que, sin embargo, reinaba feliz en Macedonia. Sócrates replica que el injusto no puede ser feliz: si recibe el castigo merecido será infeliz, pero aún más lo será si no lo recibe. Porque cometer injusticia es peor que sufrirla. La injusticia afecta al alma, de modo que si no se sufre castigo permanecerá royéndonos y causará mayor perjuicio en nosotros.</span></span></div><div><span style="font-family: georgia;"><span style="font-size: medium;"><br /></span></span></div><div><span style="font-size: medium;"><span style="font-family: georgia;">Es entonces Calicles quien entra en escena, asombrado y horrorizado por las tesis socráticas. Para <b>Calicles</b>, defensor acérimo del derecho del más fuerte, lo que ha oído no puede ser más que una broma. Calicles <b>expondrá una famosa teoría</b>, que compartirán otros sofistas en la época, y otros en el futuro, y que atañe a la diferenciación entre naturaleza y ley. Desde la naturaleza sufrir una injusticia es peor que infringirla; pero, desde la ley, lo peor es cometerla. Calicles <b>señala que las leyes las han establecido los débiles para atemorizar a los fuertes, y que cualquier persona fuerte debe despreciarlas</b>. En las polémicas</span><span style="font-family: georgia;"> palabras de Calicles:</span></span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: medium;">"<i>Pero, según mi parecer, los que establecen las leyes
son los débiles y la multitud. En efecto, mirando a sí mismos y a su propia utilidad establecen las leyes, disponen las alabanzas y determinan las censuras. Tratando de atemorizar a los hombres más fuertes y a los capaces de poseer mucho, para que no tengan más que ellos, dicen que
adquirir mucho es feo e injusto, y que eso es cometer injusticia: tratar de poseer más que los otros. En efecto, se
sienten satisfechos, según creo, con poseer lo mismo siendo inferiores.
Por esta razón, con arreglo a la ley se dice que es injusto y vergonzoso tratar de poseer más que la mayoría y a esto llaman cometer injusticia. Pero, según yo creo,
la naturaleza misma demuestra que es justo que el fuerte tenga más que el débil y el poderoso más que el que no
lo es. Y lo demuestra que es así en todas partes, tanto en
los animales como en todas las ciudades y razas humanas, el hecho de que de este modo se juzga lo justo: que
el fuerte domine al débil y posea más</i>."</span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-size: medium;"><span style="font-family: georgia;">Paradójicamente, sus afirmaciones van en una dirección que deja perplejo: el hombre fuerte debe ser injusto. Es más, lo que es de verdad justo para el hombre es cometer injusticia. </span><span style="font-family: georgia;">Si Sócrates dejase de lado la nociva filosofía, aconseja con desprecio Calicles, entendería este punto fácilmente.</span></span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Sócrates responde tratando de examinar el sentido del "hombre más fuerte", pero Calicles no acaba de estar convencido de que la vida disoluta sea peor que la moderada. Entonces Sócrates inicia una discusión orientada a la demostración de que, aunque se entiendan similares, el placer y el bien no son la misma. Porque <b>hay unos placeres buenos y otros malos</b>.</span></div><div><span style="font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-size: medium;"><span style="font-family: georgia;">Aquí Sócrates insiste en que nos encontramos ante un tema muy importante. Nada menos que saber de qué modo hay que vivir. ¿</span><span style="font-family: georgia;"><b>Qué es mejor, la política o la filosofía</b>? No descarta el maestro de Platón que pueda haber una oratoria política encaminada al bien, pero la vista en Atenas no parece que siga ese camino, pues, lejos de hacer el bien a los ciudadanos, solo trata de ganárselos.<b> Para Sócrates una vida dominada por el orden, la moderación y la justicia es sin duda mejor que el desenfreno y la fuerza propugnadas por Calicles</b>.</span></span></div><div><span style="font-family: georgia;"><span style="font-size: medium;"><br /></span></span></div><div><span style="font-size: medium;"><span style="font-family: georgia;">Calicles se enfurece y, acorralado, decide no continuar la conversación. Entonces Sócrates condensa y sintetiza las conclusiones a las que se ha llegado. La política no debe ser el arte de persuadir, sino de procurar el mayor bien a los ciudadanos. Como señala J. Calonge, cuya <i>Introducción </i>al diálogo platónico que nos ocupa, en la fantástica edición de Gredos, </span><span style="font-family: georgia;">hemos seguido aquí, "la conclusión final es que el mejor género de vida consiste en vivir y morir practicando la justicia y todas las demás virtudes".</span></span></div><div><span style="font-family: georgia;"><span style="font-size: medium;"><br /></span></span></div><div><span style="font-family: georgia;"><span style="font-size: medium;"><b>Enlaces</b>:</span></span></div><div><span style="font-family: georgia;"><span style="font-size: medium;"><br /></span></span></div><div><span style="font-size: medium;"><span style="font-family: georgia;">Volumen II de los <i>Diálogos </i>de</span><span style="font-family: georgia;"> Platón (Gredos, en pdf). Contiene los diálogos llamados "de transición":</span></span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">https://mestreacasa.gva.es/c/document_library/get_file?folderId=500013983369&name=DLFE-822497.pdf</span></div><div><span style="font-family: georgia;"><br /></span></div>elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-87990905079105089662021-02-11T21:27:00.002+01:002021-02-12T18:22:57.576+01:00 Kant, acerca de qué es la Ilustración<p><i style="font-family: georgia;">"La ilustración es la liberación del hombre de su culpable incapacidad</i><span style="font-family: georgia;">. La </span><i style="font-family: georgia;">incapacidad
</i><span style="font-family: georgia;">significa la imposibilidad de servirse de su inteligencia sin la guía de otro. Esta incapacidad es culpable porque su causa no reside en la falta de inteligencia sino de decisión y valor para servirse por sí mismo de ella sin la tutela de otro. </span><i style="font-family: georgia;">¡Sapere aude!</i><span style="font-family: georgia;"> ¡Ten el valor de
servirte de tu </span><i style="font-family: georgia;">propia </i><span style="font-family: georgia;">razón!: he aquí el lema de la ilustración. </span></p><p><span style="font-family: georgia;">La pereza y la cobardía son causa de que una parte tan grande de los hombres continúe
a gusto en su estado de pupilo, a pesar de que hace tiempo la Naturaleza los liberó de ajena
tutela (<i>naturaliter majorennes</i>); también lo son de que se haga tan fácil para otros erigirse en
tutores. ¡Es tan cómodo no estar emancipado! Tengo a mi disposición un libro que me presta
su inteligencia, un cura de almas que me ofrece su conciencia, un médico que me prescribe
las dietas, etc., etc., así que no necesito molestarme. Si puedo pagar no me hace falta pensar:
ya habrá otros que tomen a su cargo, en mi nombre, tan fastidiosa tarea. Los tutores, que tan
bondadosamente se han arrogado este oficio, cuidan muy bien que la gran mayoría de los
hombres (y no digamos que todo el sexo bello) considere el paso de la emancipación, además
de muy difícil, en extremo peligroso. Después de entontecer sus animales domésticos y procurar cuidadosamente que no se salgan del camino trillado donde los metieron, les muestran
los peligros que les amenazarían caso de aventurarse a salir de él. Pero estos peligros no son tan
graves pues, con unas cuantas caídas, aprenderían a caminar solitos; ahora que, lecciones de
esa naturaleza, espantan y le curan a cualquiera las ganas de nuevos ensayos.</span></p><p><span style="font-family: georgia;">Es, pues, difícil para cada hombre en particular lograr salir de esa incapacidad, convertida
casi en segunda naturaleza. Le ha cobrado afición y se siente realmente incapaz de servirse
de su propia razón, porque nunca se le permitió intentar la aventura. Principios y fórmulas,
instrumentos mecánicos de un uso, o más bien abuso, racional de sus dotes naturales, hacen
las veces de ligaduras que le sujetan a ese estado. Quien se desprendiera de ellas apenas si se
atrevería a dar un salto inseguro para salvar una pequeña zanja, pues no está acostumbrado a
los movimientos desembarazados. Por esta razón, pocos son los que, con propio esfuerzo de
su espíritu, han logrado superar esa incapacidad y proseguir, sin embargo, con paso firme. </span></p><p><span style="font-family: georgia;">Pero ya es más fácil que el público se ilustre por sí mismo y hasta, si se le deja en
libertad, casi inevitable. Porque siempre se encontrarán algunos que piensen por propia
cuenta, hasta entre los establecidos tutores del gran montón, quienes, después de haber
arrojado de sí el yugo de la tutela, difundirán el espíritu de una estimación racional del
propio valer de cada hombre y de su vocación a pensar por sí mismo. Pero aquí ocurre
algo particular: el público, que aquellos personajes uncieron con este yugo, les unce a
ellos mismos cuando son incitados al efecto por algunos de los tutores incapaces por
completo de toda ilustración; que así resulta de perjudicial inculcar prejuicios, porque
acaban vengándose en aquellos que fueron sus sembradores o sus cultivadores. Por esta
sola razón el público sólo poco a poco llega a ilustrarse. Mediante una revolución acaso
se logre derrocar el despotismo personal y acabar con la opresión económica o política,
pero nunca se consigue la verdadera reforma de la manera de pensar; sino que, nuevos
prejuicios, en lugar de los antiguos, servirán de riendas para conducir al gran tropel. </span></p><p><span style="font-family: georgia;">Para esta ilustración no se requiere más que una cosa, <i>libertad</i>; y la más inocente entre
todas las que llevan ese nombre, a saber: libertad de hacer <i>uso público</i> de su razón íntegramente. Mas oigo exclamar por todas partes: ¡Nada de razones! El oficial dice: ¡no razones, y
haz la instrucción! El funcionario de Hacienda: ¡nada de razonamientos!, ¡a pagar! El reverendo: ¡no razones y cree! (sólo un señor en el mundo dice: razonad <i>todo lo que queráis</i> y
sobre lo que queráis pero ¡obedeced!) </span></p><p><span style="font-family: georgia;">Si ahora nos preguntamos: ¿es que vivimos en una época <i>ilustrada</i>? la respuesta será:
no, pero sí en una época de <i>ilustración</i>. Falta todavía mucho para que, tal como están las cosas y considerados los hombres en conjunto, se hallen en situación, ni tan siquiera en disposición de servirse con seguridad y provecho de su propia razón en materia
de religión."</span></p><p><span style="font-family: georgia;"><b>Filosofía de la Historia</b>, “<i>¿Qué es la Ilustración?</i>”, México, FCE, 1992, pp. 25-30</span></p>elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-65606584072413310032020-05-21T00:13:00.000+02:002020-05-21T00:13:46.595+02:00Aristóteles (III): Obras<img alt="Aristóteles, el pensador polifacético" height="400" src="https://historia.nationalgeographic.com.es/medio/2020/03/13/aristoteles_e4c48da3_550x825.jpg" width="266" /><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">De las obras de Aristóteles suele hablarse de dos grandes grupos: las que realmente hizo públicas, de las que apenas sabemos nada actualmente; y aquellas otras que no publicó y cuyo fin tampoco era ser publicadas, pero que sin embargo sí pudieron ser recopiladas y conservadas hasta hoy.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">-<b>Obras publicadas originariamente.</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Las obras escritas por Aristóteles y publicadas en vida de éste comprenden lo que se suele denominar escritos "exotéricos". Por desgracia, estas obras se han perdido irremediablemente, al igual que les ha sucedido a otras muchas, en el transcurso de los primeros siglos de la era cristiana. Por fortuna, sabemos sus nombres y algunos pequeños detalles, gracias a las listas de las obras del Estagirita que se realizaron y a los escritos de escritores posteriores, que "copiaron" su estilo o su contenido.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">En un primer momento se pensó</span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"> que, en su mayor parte, eran diálogos similares a los platónicos, en los que se desarrollaban, exponiéndolos y exagerando a veces, los puntos de vista del maestro de Aristóteles, como mencionamos en la nota anterior de esta serie. Sin embargo, como en el otro grupo de otras nuestro autor sí realiza una potente crítica al platonismo, hubo quien consideró que en realidad Aristóteles mostraba una especie de "doble rasero", en el que, de cara al exterior, profesaba admiración por las tesis de su maestro pero que, cuando ejercía él de maestro, a sus alumnos les hablaba con mucho mayor espíritu crítico al respecto. Lo que se acepta e</span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">n realidad es que estos textos hoy perdidos fueron escritos durante la juventud de Aristóteles, cuando aún era miembro de la Academia, por lo que tiene sentido que hiciera una especie de alabanza platónica.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><i><b>Principales obras exotéricas de Aristóteles:</b></i></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><i>Eudemo</i> o Del Alma (en parte basado en el <i>Fedón</i>, de Platón).</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><i>Sobre la filosofía</i> (como un manifiesto filosófico)</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><i>Protréptico </i>(exhortación a filosofar, que será imitado por Jámblico, cuyo texto homónimo recogerá pasajes enteros del escrito por Aristóteles)</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><i>De la retórica</i> (escrito contra la escuela rival del Liceo, la de Isócrates)</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><i>Sobre la Justicia</i> (donde se apuntan temas que más tarde ampliará la Política)</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Etc. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>-Obras NO Publicadas por Aristóteles pero que son las que conocemos hoy.</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Este tipo de obras lo comprenden manuscritos de Aristóteles, que son en su gran mayoría notas, apuntes, que solía utilizar para dictar los cursos de filosofía en su escuela del Liceo. Hay que aclarar que no se trata, como se pensó, de los apuntes tomados por sus propios alumnos. Estas obras, en contraposición con las anteriores, se denominan "esotéricas", pues estaban destinadas a un uso propio, interno, y no para el</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">"exterior"</span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">. T</span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">ambién se les llama <i>acroamáticas </i>(es decir, pensadas para la enseñanza oral).</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Es de sobra conocido que Andrónico de Rodas, el último escolarca del Liceo, realizó la primera edición de las "obras completas" de Aristóteles, al menos de ésas que se han conservado, es decir, las esotéricas. Hay una curiosa historia de los vericuetos que siguieron esos textos hasta ir a parar a Andrónico, pero en su mayor parte es fantasiosa y peca de exagerada, así que no la vamos a mencionar. Pero lo que es indudable es que, gracias a Andrónico, hoy podemos disfrutar de, al menos, esas obras esotéricas del gran Estagirita. Tras la labor editorial de Andrónico, estas obras serían leídas, estudiadas y comentadas en innumerables ocasiones. Hoy, de hecho, las leemos en la forma y, a grandes rasgos, bajo los títulos que el mismo Andrónico les brindó hace 2.000 años.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Hay que tener muy presente, por tanto, que lo que leemos nosotros cuando abrimos las obras aristotélicas no son textos que nuestro filósofo pensara publicar y que llegaran al público. Andrónico recogió esos apuntes y esas notas, desordenados y un tanto caóticas, repetitivas e incluso a veces contradictorias, y tomó la decisión de darles una cohesión y un orden, dentro de lo posible.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Lo que tenía enfrente eran multitud de pequeños tratados que habían sido inicial y precariamente ordenados por discípulos del maestro macedonio (seguramente Eudemo y quizá Teofrasto). Así pues, los agrupó y los tituló según sus propios criterios, de modo que los libros aristotélicos jamás fueron editados así por su autor. Es imprescindible tener esto presente.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Por lo tanto, en la </span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><i>Metafísica</i>, por ejemplo, lo que hacemos es leer no un único volumen unitario, monobloque, que sigue una evolución</span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"> hasta una conclusión contundente, sino un conjunto de 14 tratados que tratan de temas diversos, escritos por Aristóteles con el ánimo de que le sirvieran de guía para sus clases, y cuyo contenido la labor editorial de Andrónico agrupó así. Por ello, las obras de este tipo no dan sensación de progresión, de ir dejando atrás argumentaciones o razonamientos ligados hasta alcanzar una síntesis final, sino de ser pedacitos independientes de reflexiones filosóficas, que contienen las inevitables repeticiones (así, por ejemplo, hay desarrollos paralelos sobre un mismo tema en varios libros dentro de una misma obra, como en temas éticos o metafísicos).</span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"> Tengamos muy en cuenta que, de haber sido prevista su publicación, Aristóteles jamás hubiera compuesto así sus obras esotéricas.</span><br />
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Andrónico no sólo era editor. También era filósofo, y tenía una idea de cómo quería enseñar filosofía, de cuál debía ser el plan didáctico filosófico. Y, con las obras de Aristóteles, tuvo una buena ocasión para aplicar este deseo. La primera parte de la filosofía debe ser la <i>Lógica</i>. S</span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">iguió en esto al mismo Estagirita, cuya sugerencia era que ésta </span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">no era un conocimiento realmente, sino una <i>propedéutica</i>, es decir, una especie de preparación para el estudio de la propia Filosofía. Al estudio del funcionamiento de la Naturaleza, la <i>Física</i>, debe seguirle la <i>Metafísica</i>, es decir, el análisis de todo aquello que está después-de la Física. Luego vendrían los textos de Ética, Política, R</span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">etórica, Poética, etc. </span><br />
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">Resulta curioso que, de Platón, tengamos sus obras publicadas y no los cursos que dictó en la Academia (los cuales, según todos los indicios, eran tan</span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"> escolásticos como</span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"> los de su mayor discípulo), mientras que ocurre lo contrario en el caso del Estagirita. No hay, por tanto, que contraponer el "bello, literario y sugestivo" Platón al "oscuro, complicado y seco" Aristóteles. Es un juicio muy injusto y productos del desconocimiento de lo que nos ha legado la historia de ambos titanes de la Filosofía.</span><br />
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">Además, en Platón el diálogo es entre el maestro y sus discípulos, pero en Aristóteles lo que <i>dialogan </i>son las tesis mismas, procedentes de filósofos anteriores. Por ello, no hay una exposición clara y coherente, sino más bien un devenir complejo hacia una verdad a </span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">la que se llega a través de caminos llenos de dificultades, parones y hasta giros hacia atrás.</span><br />
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">Tampoco es que Aristóteles carezca de calidad expresiva. Hay</span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"> pasajes introductorios o finales de los distintos tratados (por ejemplo, la conclusión de la <i>Ética a Nicómaco</i>, o el Prooemium de la <i>Metafísica</i>) en los que se </span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">advierte un estilo elaborado y casi "literario", como si tuviese una finalidad estética o de retórica, más allá de ser meras notas o apuntes para las clases.</span><br />
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><br /></span>
<i><b><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">Algunas </span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;">Obras esotéricas de Aristóteles conservadas:</span></b></i><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><br /><i>Organon </i>(el conjunto de escritos sobre Lógica).</span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><i>Categorías</i></span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><i>De la Interpretación</i></span><br />
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><i>Primeros </i>y <i>Segundos Analíticos</i> (2+2 libros)</span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><i>Tópicos </i>(8 libros)</span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><i>Física </i>(8 libros)</span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><i>Del Cielo</i> (4 libros)</span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><i>De la generación y corrupción</i></span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><i>Meteorológicos</i></span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><i>Del alma</i></span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;">Hay una serie de pequeños tratados de Biología, con títulos y contenidos diversos (<i>Del sueño y la vigilia</i>, <i>De la vida y de la muerte</i>, <i>De la respiración</i>, etc.), así como de temática zoológica, de la que Aristóteles fue un pionero y un gran investigador (<i>Historia de los animales</i>, 10 libros; </span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><i>Del movimiento de los animales</i>, <i>De la generación de los animales</i>, 5 libros; etc.).</span><br />
<br />
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><i>Metafísica </i>(14 libros)</span><br />
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><i>Ética a Nicómaco</i> (10 libros)</span><br />
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><i>Gran Moral</i> (2 libros)</span><br />
<span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><i>Ética a Eudemo</i> (4 libros)</span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><i>Política </i>(8 libros)</span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><i>Económica </i>(2 libros)</span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><i>Retórica </i>(3 libros)</span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><i>Política</i></span><br />
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: georgia, times new roman, serif; font-size: large;">Aquí desechamos algunas otras obras apócrifas, y cuya redacción no se circunscriba realmente a la vida de Aristóteles. A todo ello, habría que sumar las innumerables (158) versiones que redactó nuestro autor de la </span><span style="font-family: georgia, 'times new roman', serif; font-size: large;"><i>Constitución de Atenas</i>, en una paciente y agotadora labor.</span></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-37064974075001133632020-05-17T11:17:00.001+02:002020-05-17T11:17:26.689+02:00¿Dios existe verdaderamente? El argumento ontológico de San Anselmo<br />
<div style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em; text-align: justify;">
<img alt="San Anselmo de Canterbury – 21 de abril – Primeros Cristianos" height="205" src="https://www.primeroscristianos.com/wp-content/uploads/2017/08/7d13cc638b031f8ce1bae1b0204ae77c.jpg" width="400" /></div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">"Que Dios existe verdaderamente.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Luego, Señor, tú que das el entendimiento a la fe, dame de entender, tanto como consideres
bueno, que tú eres como creemos y lo que creemos. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Y bien, creemos que tú eres algo mayor
que lo cual no puede pensarse cosa alguna. Ahora, ¿acaso no existe esta naturaleza porque dijo
el necio en su corazón: no hay Dios? (Salmos XIII, 1). </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Pero por cierto ese mismo necio, cuando
oye lo que estoy diciendo, es decir algo mayor que lo cual no puede pensarse cosa alguna,
entiende lo que oye y lo que entiende está en su entendimiento, aun cuando no entienda que
ese algo existe.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">En efecto, una cosa es la presencia de algo en el entendimiento, otra cosa es
entender que ese algo existe. Así, cuando el pintor piensa con anticipación el objeto que está
por hacer, ya lo tiene en su entendimiento, pero no entiende todavía como existente algo que
no ha sido hecho aún. En cambio, cuando ya lo ha pintado, primero lo tiene en su entendimiento
y, además, entiende como existente la cosa que hizo. Luego el mismo necio ha de
convencerse de que existe en el entendimiento algo mayor que lo cual no puede pensarse cosa
alguna, porque oyéndolo lo entiende, y todo lo entendido está en el entendimiento. Y por
cierto, aquello mayor que lo cual es imposible pensar nada no puede estar en el entendimiento
sólo. En efecto, si estuviera en el entendimiento sólo, podría pensarse que existe además en
realidad, lo que sería algo mayor. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Luego si aquello mayor que lo cual no puede pensarse cosa
alguna está en el entendimiento sólo, aquello mismo mayor que lo cual nada puede ser pensado
viene a ser algo mayor que lo cual es posible pensar algo: y esto, evidentemente, no puede
ser. Luego, a todas luces, existe algo mayor que lo cual no se puede pensar cosa alguna, tanto
en el entendimiento como en la realidad."</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">San Anselmo<i>, </i>texto recogido en <i>La razón y la fe</i>, Buenos Aires, Yerba Buena, 1945, pp. 18-19.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-64107956444212248342020-04-11T03:31:00.001+02:002020-04-11T03:34:46.032+02:00Aristóteles (II): Vida<img alt="Aristóteles - Revista Esfinge" height="320" src="https://www.revistaesfinge.com/media/k2/items/cache/7faf56e5874604be96ba8fa8c4e07ea4_XL.jpg" width="309" /><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">A finales del verano del año 384 antes de Cristo vino al mundo <b>Aristóteles</b>, en la pequeña ciudad de <b>Estágira</b>, en Tracia. Hijo de Nicómaco, un afamado médico que trabajaba para el rey Amintas III de Macedonia, y de su madre Faistis, que procedía de Eubea (lugar donde poseía una casa, y a la que su famoso hijo volvería al final de su vida), de</span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">scendía de una familia de Asclepíades, es decir, médicos que pretendían descender de Asclepios, el dios de la medicina. La enseñanzas médicas pasaban de padres a hijos y el pequeño Aristóteles con seguridad recibiría una formación en este campo, lo que muy probablemente está ligado a su aprecio por las ciencias naturales, y particularmente la biología.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">El futuro gran filósofo se mudaría pronto de Estagira a Pela, y puede que allí conociera a <b>Filipo</b>, niño al igual que él, hijo de <b>Amintas III</b> y que en el futuro sería rey (como <i>Filipo II</i>). Aristóteles perdió pronto a sus padres, antes del año 367 a. de C. <b>Próxenos</b>, el marido de la hermana del pequeño, fue quien recibió de Nicómaco el encargo de educarlo, de modo que Próxenos y su hermana fueron sus tutores y padres adoptivos, a quienes Aristóteles siempre tuvo en gran estima y les fue muy agradecido.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Tras la muerte de Amintas III y el asesinato de su sucesor (Alejandro II), Ptolemaios de Alaros se hizo cargo de la monarquía macedonia. No sólo había matado a su antecesor, sino que perseguía a los seguidores de Amintas, por lo que <b>Aristóteles decidió marcharse</b> con sus padres adoptivos a su casa de Estagira. Allí completó su educación básica, seguramente, y puede que le cayera alguna obra de Platón. En todo caso, hacia el 367 antes de Cristo se mudó nuevamente, esta vez a Atenas.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">En <b>Atenas</b>, y a los diecisiete años de edad, nuestro personaje entra a formar parte de la <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2013/03/la-academia.html"><b>Academia</b></a>, donde permanecerá dos décadas, hasta la muerte de su maestro, el insigne <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/search/label/Plat%C3%B3n"><b>Platón</b></a>. De la relación de Aristóteles con Platón y el pensamiento de éste, los puntos en común y las evidentes diferencias, hablaremos en una próxima nota.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">En la <b>Academia </b>Aristóteles destacó, siendo uno de los miembros más brillantes. <b>Apasionado por la lectura</b> (leí a él mismo los libros, algo infrecuente en la época, ya que solía ser un criado especial quien los leía en voz alta), parece que ser que fue uno de los primeros griegos que se dedicaba a leer de forma personal todo lo que podía. Platón le llamó, de hecho, "el Lector", seguramente con algo de mofa.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">En el momento en que llega a la Academia, Platón está de viaje en Sicilia, y Aristóteles trata estrechamente con el director de la escuela (escolarca), el astrónomo, matemático y filósofo de gran reputación <b>Eudoxo</b> de Cnido, del que luego recogería su sistema astronómico para su propia <i>Física</i>.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Durante estos años <b>Aristóteles ya escribe y publica diálogos</b> propios, aunque a la manera platónica, como el que dirige a la escuela rival de Isocrátes, y en otros desarrolla tesis de su maestro.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Cuando falleció Platón y escogió como sucesor a <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2019/10/la-academia-antigua-espeusipo.html">Espeusipo</a>, su sobrino, parece que <b>Aristóteles </b>no se lo tomó de buen grado. El hecho es que <b>no volvió ya nunca más</b> <b>a la Academia</b>, pero aunque ciertamente tuvo una enemistad con Espeusipo, su negativa se debió más a un enfoque distinto del estudio, no por odio o rencor ni al escolarca de entonces ni, mucho menos, a su maestro Platón.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Salió entonces Aristóteles de Atenas en compañía de <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2019/11/la-academia-antigua-jenocrates.html">Jenócrates</a>, quienes fueron a <b>Assos </b>y allí fundaron una rama de la Academia. Allí fue consejero político y amigo del tirano <b>Hermias </b>(recordemos que el vocablo "tirano" actualmente tiene connotaciones peyorativas, pero entonces muchos tiranos gozaban de las simpatías y el aprecio de los ciudadanos). También <b>se casó con Pitia</b>, la sobrina del tirano, que murió siendo aún bastante joven, y con la que nuestro filósofo parece que fue muy feliz. Tres años después </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Aristóteles pasó a <b>Metilene</b>, donde probablemente conoció a <b>Teofrasto</b>, que iba a ser el discípulo más importante del estagirita. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>Hermias y Filipo II de Macedonia</b> (antiguo amigo de Aristóteles, y que había accedido al trono en 359 a. de C.) empezaron a entablar negociaciones para llevar a cabo una victoria helénica sobre Persia, pero el general persa Mentor capturó a traición a Hermias y, tras una trágica tortura, asesinó al tirano. La ejecución causó una profunda conmoción en </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Aristóteles. Para honrarle, escribió un himno cuasi religioso que, más tarde, le traería bastantes problemas.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Estos cinco años repartidos entre Assos y Metilene fueron muy productivos, en los que el estagirita llevó a cabo numerosos <b>estudios naturalistas</b> y de búsqueda de los <b>principios básicos de la Física</b>, y en los que pudo vivir alejado de las intrigas y tensiones propias de la corte macedona y las agitaciones propias de Atenas.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Pero en 342 antes de Cristo esta vida relajada terminó, ya que su amigo <b>Filipo II le invitó a la corte de Pela</b> para que se encargara de la educación y formación de su hijo, <b>Alejandro Magno</b>, que entonces tenía trece años de edad. </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Aristóteles no podía negarse, ni tampoco lo deseaba; antes al contrario, era una oportunidad fascinante. En la Academia, uno de los máximos objetivos era que los filósofos pudieran influir en la conducta y decisiones de un monarca o príncipe, inculcándole los valores y principios de la filosofía política adecuada. Platón había tratado de lograr algo así con Dionisos II, el tirano de Siracusa, pero sus dos viajes con tal propósito habían terminado en catástrofe. Aristóteles, por tanto, tenía una nueva oportunidad ante sí, y nada menos que la de formar al futuro líder de todos los griegos. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Curiosamente, <b>de esta etapa</b>, que abarca ocho años en la vida del estagirita, <b>no se sabe prácticamente nada</b>. Cuando muere Filipo (335 a. de C.), Alejandro Magno sube al trono, y <b>Aristóteles abandona Pela</b> (se supone que ya está concluida su labor docente con el joven rey) para dirigirse nuevamente a Estagira durante un corto tiempo. Si bien nuestro pensador mantenía cierto vínculo con su discípulo, lentamente se va agrietando, en parte debido a la distinta forma de entender los pueblos griegos y "bárbaros" (Alejandro los veía como iguales, algo inaceptable para </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Aristóteles, que siempre denigró a los segundos [propuso cuidar de ellos como uno cuida a "sus animales"]). Pero, también, a consecuencia de la ejecución de su sobrino Calístenes, que había ido a servir a Alejandro, pero contra el que cayeron sospechas de conjura contra el rey y fue ajusticiado.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">En 334 antes de Cristo Aristóteles <b>vuelve a Atenas</b>. Tal vez lo "normal" hubiera sido que se reintegrase a la Academia (en ese momento dirigida por su buen amigo Jenócrates), pero dados los 17 años transcurridos desde su partida, así como sobretodo el hecho de que allí se trataba más los temas de dialéctica y la matemática, mientras que </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Aristóteles estaba más interesado en la investigación empírica de la naturaleza, le hicieron decidir <b>formar su propia institución</b>.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">El santuario del <b>Liceo </b>disponía de gimnasios (como también sucedía con la misma Academia), así como amplios jardines y pórticos, los cuales eran lugar de reunión en los que se paseaba, charlaba y discutía temas de actualidad mientras se caminaba. Aristóteles decidió entonces dar sus clases en el gimnasio del Liceo, terrenos con árboles y abundantes fuentes. El gimnasio, gigantesco, construido en la época de <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2007/11/pericles-y-la-democracia-de-atenas.html">Pericles</a>, poseía un <i><b>perípatos</b></i>, o sea, un paseo porticado, razón por la cual a la escuela aristotélica también se le conoce con el nombre de <i>peripatética</i>.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Aristóteles era entonces muy célebre, y su amistad con el rey debió permitirle acceder a métodos de investigación y estudio excepcionales. <b>Por las mañanas</b> nuestro filósofo se dedicaba a los <b>cursos</b> más complejos y difíciles de filosofía, digamos, "universitaria" (sus alumnos tomaban apuntes que, como veremos en la siguiente nota de la serie, resultarían fundamentales), llamados "<b>esotéricos</b>". <b>Por la tarde</b> </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">se dirigía a un auditorio más amplio y popular, y allí les daba lecciones de retórica y dialéctica ("<b>exotéricas</b>"). Tanto en el Liceo como en la Academia había miembros jóvenes y avanzados, y cada uno vivía por su cuenta, y en ningún caso se pagaba ni recibía nadie remuneración ninguna. El escolarca, en ambas escuelas, no imponía ninguna doctrina ni postura, sino que espoleaba a los miembros a pensar críticamente y con originalidad.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Al morir Alejandro Magno en 323 antes de Cristo (muerte cuya causa sigue siendo un misterio), se desató inmediatamente en Atenas una exacerbada <b>agitación antimacedona</b> liderada por Demóstenes. Aristóteles había tramado amistad con Antípatros, un general macedonio de Filipo II, que había sido escogido por Alejandro cuando marchó a conquistar Asia en 334 a. de C. Pero aquel tuvo que marchar también poco después a Babilonia, y cuando se conoció la muerte del rey, Atenas quedó desguarnecida y en peligro de levantamiento. Ahora que Alejandro había muerto y Antípatros estaba lejos, Aristóteles era la principal cabeza visible de la simpatía macedonia. <b>Acusado de impiedad</b> (por el himno a Hermias mencionado), acusación que no era sino un pretexto para descargar sobre el estagirita todo el odio de los nacionalistas atenienses contra lo macedonio, nuestro pensador <b>tuvo que partir </b>apresuradamente de Atenas para salvar su vida. Como dijo, al parecer, lo hizo <b>para "evitar que los atenienses cometieran un segundo crimen contra la filosofía"</b>, en evidente referencia a <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2015/12/dialogos-de-platon-apologia.html">Sócrates y su juicio</a>.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Llegó entonces a <b>Eubea</b>, donde poseía una finca con una casa herencia de su madre. Aquí permaneció Aristóteles unos meses, <b>hasta el día de su muerte</b>, a principios de otoño del año 322 antes de Cristo, a los 62 años de edad y aún en plena madurez mental. Parece ser que una enfermedad del estómago (cáncer o úlcera) fue la causa.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">En su <b>testamento </b>cita a su hija menor, Pitia, llamada como su primera mujer; Herpilis, que había trabajado con el servicio de Aristóteles y con la que éste se casó al morir Pitia; y su hijo Nicómaco, fruto de su unión con Herpilis. Y especifica que sus restos mortales no se separen de Pitia, como ella misma había deseado.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Según parece, <b>Aristóteles fue feliz en ambos matrimonios</b>, y en esto también se separa de su maestro Platón (quien, probablemente, era homosexual), o el estoico Zenón o Epicuro, ambos solteros. Por no mencionar a los misóginos Teofrastro (que escribió un libro contra el matrimonio) o el mismo Sócrates, que despreciaba a la mujer. El mismo Teofrasto sería el encargado de seguir las enseñanzas de su maestro en el Liceo.</span></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-17826872569244066482020-04-05T23:58:00.003+02:002020-04-06T00:01:29.202+02:00Heráclito (Fragmentos)<img alt="Heráclito de Éfeso: su entierro en estiércol | Chispa" height="320" src="https://www.chispa.tv/__export/1574267431111/sites/debate/img/2019/11/20/heraclito_crop1574266300752.jpg_1515542632.jpg" width="320" /><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>1:</b> Aunque este logos (fundamento o razón) existe siempre, los hombres se vuelven incapaces</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">de comprenderlo tanto antes de oírlo como cuando lo han oído por primera vez; </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">en efecto, aun cuando todo/todas las cosas suceden según este logos, parecen inexpertos al </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">experimentar palabras y hechos como los que yo describo siempre que distingo cada cosa </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">según la naturaleza y muestro cómo es. Pero a los demás seres humanos se les ocultan cuántas </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">cosas hacen despiertos, como se les ocultan cuántas hacen mientras duermen.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>2:</b> Por lo cual es necesario seguir lo común; pero aunque el logos (pensar) es común [a </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">todo/s], la mayoría vive como si tuviera un pensamiento particular.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>10:</b> Conexiones: entero y no entero, convergente-divergente, consonante-disonante: </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">de todo/todas las cosas, unidad y de uno/la unidad, todo/todas las cosas.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>12:</b> Para quienes están bañándose en los mismos ríos fluyen aguas distintas y distintas.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>26:</b> El ser humano enciende a sí mismo una luz en la noche cuando su vista se apaga; </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">y mientras vive, al dormir está en contacto con quien está muerto y cuando está despierto </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">con el que duerme.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>30:</b> Este mundo, el mismo para todos, no lo hizo ninguno de los dioses ni de los </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">hombres, sino que siempre era, es y será fuego siempre vivo, que se enciende con medidas </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">y se apaga con medidas.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>32:</b> Lo uno, el único sabio, quiere y no quiere llamarse con el nombre de Zeus.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>51:</b> No comprenden cómo lo diferente concuerda consigo mismo; armonía de tensiones </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">opuestas como la del arco y la lira.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>52:</b> El tiempo vital es un niño que juega a las damas; su reino es el de un niño.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>62:</b> Inmortales-mortales, mortales-inmortales: éstos viven la muerte de aquéllos, </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">aquéllos mueren la vida de éstos.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>80:</b> Conviene saber que la guerra es común, que la justicia [es] disputa y que todo/</span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">todas las cosas sucede/n según disputa y necesidad.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>88:</b> Lo mismo [en nosotros] lo que vive y muerto, lo despierto y lo dormido, lo joven </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">y lo viejo; estos se cambian en aquellas y a su vez aquellas se cambian en estas.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>103:</b> Común, el principio y el fin para la circunferencia de un círculo.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>123:</b> La naturaleza ama ocultarse.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>126:</b> Las cosas frías se calientan, lo caliente se enfría, lo húmedo se seca, lo reseco </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">se humedece.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">“<b>Fragmentos</b>”, en <i>Los filósofos presocráticos</i>, Madrid, Planeta-Agostini, 1998, pp. 23-97.</span>elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-88030703241748699642020-03-30T19:34:00.000+02:002020-03-30T19:35:50.191+02:00'Diálogos' de Platón (V): Laques<img height="400" src="https://images-na.ssl-images-amazon.com/images/I/21FfguMdeHL._SX311_BO1,204,203,200_.jpg" width="250" /><br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>Diálogos de Platón:</b> Primera Etapa: <i>Socrática o de juventud</i> (393-388 antes de Cristo)</span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i><a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2015/12/dialogos-de-platon-apologia.html"><b>Apología de Sócrates</b></a></i>: una defensa del maestro de Platón, condenado a muerte por la democracia ateniense.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i><b><a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2020/03/dialogos-de-platon-iv-criton.html">Critón</a></b></i>, o del deber, en el que Sócrates rechaza escapar de la cárcel<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i>Ion</i>, mención a un rapsoda homérica, que canta sobre la Ilíada y reflexiona sobre la inspiración poética.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i>Lisis</i>, diálogo referido a la amistad.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i><b><a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2019/11/dialogos-de-platon-iii-protagoras.html">Protágoras</a></b></i>, que discute sobre los sofistas y su forma de dialogar y metodología.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<b>Laques</b>, cuyo título hace mención a un general, en el que se trata del valor.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i>Cármides</i>, que trata sobre la sabiduría moral.</span><br />
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-</span><i style="font-family: georgia, "times new roman", serif;">Eutifrón</i><span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">, diálogo que estudia la piedad y si es adecuada o no la acusación.</span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Ubicado, como otros diálogos de la misma índole y características (como la Apología, Protágoras, etc.), dentro de los llamados <i>Diálogos</i> iniciales (o <i>socráticos</i>), <b>Laques </b>tiene una naturaleza bastante breve y se centra básicamente en la idea de poder definir una virtud, la del valor, y ello conduce otra cuestión no menos relevante, la a educación de los niños.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>Este diálogo es un modelo de los de juventud</b>, en el que en efecto, domina la breve extensión (sólo hay que compararlo con la <i>República</i>), la discusión de un tema ético, una estructura bastante sencilla y, finalmente, la <b>conclusión <i>aporética</i></b>, es decir, aquella en la que se alcanza un callejón sin salida, y no se puede ofrecer una respuesta definitiva y preciosa. Con ello, la certeza inicial de la que hacen gala muchos de los interlocutores de Sócrates queda destruida.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Siguiendo el análisis que hace Carlos García Gual en su <i>Introducción </i>al diálogo en la edición de Gredos (Platón, <i>Diálogos</i>, Madrid, 1981, vol. 1, pág. 445), en efecto "resulta claro que la única conclusión válida de este coloquio es el rechazo de las opiniones admitidas sin previo análisis y el reconocimiento de la ignorancia de los interlocutores"</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">En cuanto a la <b>fecha de su composición</b>, parece ser que lo más razonable es suponer que tuvo lugar hacia el 420 antes de Cristo; ayuda a esta opinión el que posea un planteamiento sencillo y no introduzca casi ningún término filosófico complejo, de modo que cabe pensar que es anterior al Eutifrón. <b>Temáticamente</b>, el Laques <b>se relaciona con el Protágoras</b>, el cual analizará con más detalle algunos de los aspectos esbozados aquí. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>Platón contrapone, como expertos</b> en el tema que va a tratar (recordemos, el valor), <b>a dos personajes</b> de carácter bastante distinto. En primer lugar, el fogoso <b>Laques</b>, que da título al diálogo y que combatió realmente con Sócrates en la retirada de Delión, el año 424 antes de Cristo. Laques elogia el comportamiento que tuvo el maestro de Platón en el campo de batalla y él mismo moriría en la batalla de Mantinea en 418 a. C. Laques exhibe el temperamento ardiente, valiente y noble, pero algo simple, poco elegante o sutil. En segundo lugar tenemos a <b>Nicias</b>, que es educado, culto, un general ateniense respetado y probo ciudadano. Nicias moriría, a su vez, en la expedición ateniense contra Sicilia, descrita por Tucídides. La forma en que Platón perfila la personalidad de ambos es fina y elegante, y el diálogo presenta una gran vivacidad.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Además, a los dos generales les acompañan <b>Lisímaco</b>, que es hijo de Arístides y que ansía que sus hijos destaquen en Atenas gracias a la buena educación; <b>Melesias</b>, hijo a su vez de un jefe del partido aristocrático, rival de Pericles.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>El encuentro acontece en algún gimnasio público de Atenas</b>, tras asistir los participantes a la representación de una <i>hoplomachía</i>, esto es, un simulacro de combate con armas propias de los hoplitas, especialistas en este tipo de actos. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>Lisímaco y Melesias</b> son ciudadanos atenienses respetados, pero cuyas vidas no han aportado nada a la sociedad. Por ello <b>tratan de que sus hijos adquieran una formación que les eleve y brillen por encima de la mediocridad</b>. Esto está relacionado con la presencia en la capital ateniense de sofistas que se "venden" como maestros de virtud para los jóvenes de las clases distinguidas.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>Nicias </b>hace ver en el diálogo que, en su opinión y recogiendo el estímulo de Sócrates, que la <i>andreía</i>, el valor, debe ser un cierto saber, una <i>epistéme</i>. ¿Por qué? Porque permite conocer lo que es y qué acción se halla entre lo temible y lo reconfortante: actuamos con más o menos valor en función de nuestra distancia a de esos dos extremos. Esta es una postura, digamos, "intelectual", a la cuestión. </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">La definición que ofrece Nicias, sin embargo, será rechazada por Sócrates, dado que es inespecífica. </span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">El ardoroso <b>Laques </b>no está de acuerdo con lo dicho por Nicias. Previamente ya había propuesto que el valor forma parte de la virtud del temperamento. Por tanto, se halla como fuera de lo racional, pero éste es un extremo que refuta Sócrates igualmente. Y además,</span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"> la <i>andreía </i>no se puede analizar específicamente, pues es parte integral de la <i>areté </i>(de la virtud, en genérico).</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Y así llegamos a la "<i><b>conclusión</b></i>" del diálogo, que obviamente no existe, puesto que es aporético, como hemos mencionado. <b>Ninguno de los dos generales es capaz de ofrecer una definición apurada</b>, una explicación, de qué es aquello que les hace destacar (su <i>valor</i>). </span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Sócrates se despide de Lisímaco, a quien promete volver a visitar en el futuro para poder hablar más acerca del importante tema de la educación de los jóvenes. </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">La cuestión de la </span><i style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: x-large;">andreía </i><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">será tratada, más adelante, por Platón en diálogos de madurez (como la <i>República</i>, 430b, y en las <i>Leyes</i>, 963c-e).</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-size: large;"><br />
-Algunas ediciones de <b>Laques </b><i>on-line</i>:<br />
<br />
<a href="http://www.filosofia.org/cla/pla/azc01259.htm">http://www.filosofia.org/cla/pla/azc01259.htm</a><br />
<a href="http://www.dominiopublico.gov.br/download/texto/bk000472.pdf">http://www.dominiopublico.gov.br/download/texto/bk000472.pdf</a> (edición de Gredos)</span></span></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-58632608362483573102020-03-27T23:57:00.000+01:002020-03-27T23:58:28.860+01:00El culmen del racionalismo<img height="200" src="https://nuevarevolucion.es/wp-content/uploads/descartes.jpg" width="320" /><br />
<br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">"Arquímedes, para trasladar la tierra de lugar, sólo pedía un punto de apoyo firme e inmóvil; así yo también tendré derecho a concebir grandes esperanzas, si por ventura hallo tan sólo una cosa que sea cierta e indubitable. Así pues, supongo que todo lo que veo es falso; estoy persuadido de que nada de cuanto mi mendaz memoria me representa ha existido jamás; pienso que carezco de sentidos; creo que cuerpo, figura, extensión, momento, lugar no son sino quimeras de mi espíritu. ¿Qué podré, entonces, tener por verdadero? Acaso esto solo: que nada cierto hay en el mundo. Pero, ¿qué sé yo si no habrá otra cosa, distinta de las que acabo de reputar inciertas, y que sea absolutamente indudable? ¿No habrá un Dios, o algún otro poder, que me ponga en el espíritu estos pensamientos? Ello no es necesario: tal vez soy capaz de producirlos por mí mismo. Y yo mismo, al menos, ¿no soy algo? Ya he negado que yo tenga sentidos ni cuerpo. Con todo, titubeo, pues, ¿qué se sigue de eso? ¿Soy tan dependiente del cuerpo y de los sentidos que, sin ellos, no puedo ser? Ya estoy persuadido de que nada hay en el mundo; ni cielo, ni tierra, ni espíritus ni cuerpos, ¿y no estoy asimismo persuadido de que yo tampoco existo? Pues no: si yo estoy persuadido de algo, o meramente si pienso algo, es porque yo soy. Cierto que hay no sé qué engañador todopoderoso y astutísimo, que emplea toda su industria en burlarme. Pero entonces no cabe duda de que, si me engaña, es que yo soy; y, engáñeme cuanto quiera, nunca podrá hacer que yo no sea nada, mientras yo esté pensando que soy algo. De manera que, tras pensarlo bien y examinarlo todo cuidadosamente, resulta que es preciso concluir y dar como cosa cierta que esta proposición: "yo soy", "yo existo", es necesariamente verdadera, cuantas veces la pronuncio o la concibo en mi espíritu".</span><br />
<br />
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;">René Descartes, <i>Meditaciones Metafísicas</i>, Meditación Segunda.</span>elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-18889944254754900252020-03-24T01:44:00.001+01:002020-04-11T03:34:23.456+02:00Aristóteles (I): Introducción<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjgYkk91ir_bTFnPRZpZCf9wfytEGmt0WckoQwywpKvfykGAUKpf1XYpFrZiWEgQsla_vLshjrwCKpiDOYQYRZgjf5hHW87AqXdg1mFpTi8ffWPo_XDXjv596y3wxLAp8drWZD8/s1600/thessaloniki-escultura-de-arist%25C3%25B3teles-80875025.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="900" data-original-width="600" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjgYkk91ir_bTFnPRZpZCf9wfytEGmt0WckoQwywpKvfykGAUKpf1XYpFrZiWEgQsla_vLshjrwCKpiDOYQYRZgjf5hHW87AqXdg1mFpTi8ffWPo_XDXjv596y3wxLAp8drWZD8/s320/thessaloniki-escultura-de-arist%25C3%25B3teles-80875025.jpg" width="213" /></a></div>
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<b style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: x-large; text-align: justify;"><u><br /></u></b>
<b style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: x-large; text-align: justify;"><u><br /></u></b>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Durante todos los años de vida de este <i>blog </i>(vida que, en algunos momentos, ha estado a punto de apagarse para siempre...), hemos hablado, y seguimos haciéndolo, de pensadores y escuelas de la época clásica. Sin ir más lejos, de Platón hemos realizado dos series: <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/search/label/Serie%20%22Plat%C3%B3n%22">una en la que hemos analizado aspectos concretos de su pensamiento</a>; y otra, que mantenemos en la actualidad, en la que estudiamos sus <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/search/label/Serie%20%27Di%C3%A1logos%20de%20Plat%C3%B3n%27">Diálogos</a>, uno por uno.</span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Pero, hasta el momento, apenas habíamos mencionado al otro "grande" de la época antigua: Aristóteles. Teniendo en cuenta que el <i>blog </i>posee ya una existencia de más de una década, no haberle dedicado ni una sola nota al que, quizá, es el más grande de los filósofos (no sólo en el tiempo clásico, sino de todos los tiempos), es una carencia injustificable. De modo que, con esta nota, iniciamos una nueva serie, dedicada al gran Estagirita. <i><b>Recorreremos su vida, sus obras, su relación con el platonismo, la ciencia, la física, la metafísica, la psicología, la epistemología, la ética, la política y la estética según las vio el gran filósofo macedonio</b></i>.</span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Las obras que empleamos para poder escribir esta serie de notas se recogen al final de la presente, pero en casi todas ellas vamos a emplear la totalidad de las fuentes. Hay, naturalmente, una <b>cantidad ingente de manuales, textos y versiones más o menos fidedignas de las obras aristotélicas</b>, pero nosotros nos vamos a ceñir a las citadas.</span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>Aristóteles</b>, sobretodo a lo largo de todo el periodo medieval, fue visto por muchos como el más grande y genuino pensador. Su prestigio era tal que todo lo que se relacionaba con la "razón humana" (así, en genérico) estaba directa o indirectamente ligado a las tesis y opiniones aristotélicas. Casi toda la filosofía propia de los pensadores cristianos, musulmanes o judíos está conectada con nuestro filósofo, y las cuestiones, disputaciones y comentarios que hicieron no son sino interpretaciones, hipóstasis y reelaboraciones de ideas, nociones y conceptos que brindó el gran estagirita.</span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Sin embargo, hay que ir con cuidado, porque precisamente toda esta sarta de <b>reinterpretaciones y acomodaciones posteriores</b> pueden (y, de hecho, así ha sido) ensombrecer y emborronar al Aristóteles original, dado que muchos (encadenados como estaban a sus respectivas religiones del Libro) quisieron encajarle como mejor se pudiera a sus propias creencias.</span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>Es imposible (además de absurdo) separar a Aristóteles de su tiempo</b>, de los valores imperantes tanto como de los prejuicios, pero hay que aceptar que, como señala Jesús Mosterín, "más allá de la inevitable caducidad de sus tesis, es esa aura de sentido común, inteligencia y serenidad lo que todavía sigue interesándonos y atrayéndonos" de Aristóteles.</span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>El sabio de Estagira no hacía la típica distinción, como ahora, entre Ciencia y Filosofía</b>; a él no se le podía etiquetar como científico o como filósofo, pues era ambas cosas. Es más, fue el fundador de la mayoría de las disciplinas filosóficas, y de otras que no tenían relación con ellas. Era tanto un astrónomo como un lógico, un crítico literario que un biólogo, un físico que un historiador... "Las dos culturas" no tendrían ninguno sentido para él, como tampoco para los renacentistas, como espíritu humano deberíamos recuperar en la actualidad, aprendiendo por igual (al menos en sus aspectos básicos) todas las ramas del saber y la cultura humanas.</span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Podríamos decir que Platón, el maestro de Aristóteles en la Academia, fue quien planteó todos los grandes problemas y cuestiones filósoficas que, con el transcurrir de los siglos y los milenios, los posteriores filósofos irían abordando cada una según sus propias nociones. Pero <b>Aristóteles</b>, el más creativo y el más sistemático de todos sus discípulos, fue quien ordenó, <b>estructuró y organizó esos mismos problemas</b>, y quien, además, elaboró todo un catálogo de conceptos para poder tratarlos y enunciarlos del mejor modo.</span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Es decir, en Platón lo que tenemos son extensos diálogos en los que la sistematización brilla por su ausencia, y en cambio domina una forma más dispersa, más literaria, sin seguir un orden, en la que los conceptos y las ideas a veces pueden quedar inconclusas, como sin llegar a ningún puerto al terminarlo. O puede ser difícil, por la misma naturaleza del diálogo, llegar a un concepto concreto. <b>Aristóteles</b>, por su parte, <b>analiza todo de un modo parcelado, sistemático, y clarifica mucho la exposición</b>, pese a que su prosa, cuyo motivo veremos, es ardua y nada agradable, al contrario que la forma dialogada tan bella de Platón.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Podríamos decir que <b>la obra de Aristóteles es</b> como un fresco de su tiempo, <b>una especie de enciclopedia</b> que recoge, sintetiza y resume los saberes de la época.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Hay una serie de conceptos fundamentales que recorren la obra filosófica de nuestro personaje. "Ser", "sustancia" y "propiedades", por ejemplo, son expresiones fundamentales para poder comprender su <i><b>Metafísica</b></i>. Todos estos conceptos los iremos tratando a su tiempo en esta serie.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">La <i><b>Física </b></i>aristotélica, por su parte, es el estudio de la naturaleza, que comprende su teoría del mundo y, dentro de la cual, también encontramos la noción de hombre. Para el sabio macedonio, el hombre no es más que un tipo especial de animal, el "zoon politikón" (en griego, o animal político), que además de poseer vida y facultades perceptivas de su entorno, posee entendimiento, que le permite conocer las causas de lo que sucede. Y su mismo comportamiento puede seguir unas pautas que constituyen el "saber práctico" (o <i><b>Ética</b></i>), el cual se relaciona en último término con ese otro tipo de saber que permite al hombre vivir en sociedad, en comunidad, y que debe regir su comportamiento social (<i><b>Política</b></i>).</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Éstas son algunas de las temáticas que iremos viendo a lo largo de esta serie. Os invitamos a descubrir al gran filósofo macedonio con nosotros.</span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<b style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: x-large;">-Bibliografía </b><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">empleada en la presente serie:</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
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<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">-<i>Historia de la Filosofía</i>, F. Copleston, Volumen 1 (Grecia y Roma), Ariel, Barcelona, 2004.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">-Aristóteles, J. Mosterín, Alianza Editorial, Madrid, 2006.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">-Aristóteles, <i>Obras </i>(con estudio introductorio de Miguel Candel), Gredos, Barcelona, 2011.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">-<i>Historia de la Filosofía</i>, Nicolás Abbagnano, Volumen 1 (Filosofía antigua - Filosofía patrística - </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Filosofía escolástica), </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Hora, Barcelona, 1994.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">-<i>La filosofía griega</i>, B. Parain (dir.), Siglo XXI, Madrid, 2002.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">-<i>Historia de la Filosofía</i>, J.R. Ayllón, M. Izquierdo y C. Díaz, Ariel, Barcelona, 2005.</span></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-53485023671070817072020-03-21T18:32:00.000+01:002020-03-21T18:32:11.467+01:00'Diálogos' de Platón (IV): Critón<img alt="Resultado de imagen de critón platón" height="320" src="https://tiendateatral.com/1128/criton-platon.jpg" width="200" /><br />
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<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>Diálogos de Platón:</b> Primera Etapa: <i>Socrática o de juventud</i> (393-388 antes de Cristo)</span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i><a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2015/12/dialogos-de-platon-apologia.html"><b>Apología de Sócrates</b></a></i>: una defensa del maestro de Platón, condenado a muerte por la democracia ateniense.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i><b>Critón</b></i>, o del deber, en el que Sócrates rechaza escapar de la cárcel<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i>Ion</i>, mención a un rapsoda homérica, que canta sobre la Ilíada y reflexiona sobre la inspiración poética.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i>Lisis</i>, diálogo referido a la amistad.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i><b><a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2019/11/dialogos-de-platon-iii-protagoras.html">Protágoras</a></b></i>, que discute sobre los sofistas y su forma de dialogar y metodología.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i>Laques</i>, cuyo título hace mención a un general, en el que se trata del valor.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">-<i>Cármides</i>, que trata sobre la sabiduría moral.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="background-color: white;">-<i>Eutifrón</i>, diálogo que estudia la piedad y si es adecuada o no la acusación.</span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">El <i><b>Critón </b></i>es el diálogo <b>más breve</b> de entre los escritos por Platón en su primera época. Su nombre hace referencia a un amigo de Sócrates, Critón, acaudalado y con cierta capacidad de manejar a personas a través de su fortuna. Y que se presta a ayudar del mismo modo al maestro de Platón para que huya de Atenas y pueda salvar la vida.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Por su contenido, este diálogo se enlaza con la <i>Apología de Sócrates</i>, que ya analizamos, aunque no está claro si realmente "sigue" a este; su redacción podría ser algo posterior, pero también casi simultánea. Hay quien aporta la fecha del <b>396 antes de Cristo</b> como fecha probable de composición (</span><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">María Rico
Gómez, en su edición del Critón: </span><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Centro de Estudios Constitucionales, Madrid
1986)</span>.<span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;"> La idea discutida aquí es la de <b>tomar decisiones que puedan salvar a uno </b>de la muerte (o, en su defecto, de algo que nos resulte pernicioso) <b>violando las leyes</b> que determinan lo contrario. En el caso de Sócrates, la prisión y su inminente ejecución representan la sentencia, el dictamen de la Ley.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">El <i>Critón</i>, seguramente a causa de su carácter primerizo y tan escueto, <b>no pretende dar una definición general</b> de un concepto ni de rechazar un argumento porque tiene algún defecto de razonamiento; es más, a lo largo del diálogo da la impresión de que estamos analizando conceptos, pero incluso así todo está supeditado a la idea básica del texto: la decisión que se toma y por qué.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Cuando uno decide seguir las leyes debe hacerlo hasta el último momento, hasta la última consecuencia. No tiene sentido que, cuando la circunstancia sea adversa a nuestros propios intereses, la rechacemos o intentemos saltárnosla. Esto se relaciona con el "<b><i>acto heroico</i></b>", acto que es en principio motivo de admiración para todo hombre. Pero si uno decide llevarlo a cabo no puede retirarse cuando está en condiciones ya de lograrlo; ello supondría una vergüenza para dicho sujeto. Actuar heroicamente es hacerlo, a través de una decisión personal y única, adecuadamente a una idea o un deber moral. Incluso aunque ello suponga dificultad o contraprestación para quien la ejecuta.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Entre la condena de Sócrates y su ejecución debió transcurrir un mes, aproximadamente. Este tiempo exageradamente largo, y angustioso para el común de los mortales, fue consecuencia de la procesión que, anualmente, enviaba Atenas a Delos en recuerdo de la victoria de Teseo sobre el Minotauro. Durante el trayecto de ida y vuelta estaba prohibido ejecutar cualquier sentencia de muerte.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Durante ese tiempo, <b>Sócrates fue invitado</b> (no cabe duda al respecto) <b>a huir de la prisión</b>, por parte de Critón y de otros amigos del sabio ateniense. La causa de esta petición estribaba en la irritación que aquellos sentían por la sentencia, a todas luces injusta. El diálogo nace precisamente de esa petición, y a lo largo de las pocas páginas de que consta Sócrates nos muestra su posición.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><b>La razón es lo que debe prevalecer siempre</b>. Esto significa que si los razonamientos son correctos hay que seguirla; y no tiene valor hacerlo cuando no nos afectan o no tiene implicaciones en nosotros directamente. Es precisamente al afectarnos cuando hemos de seguirlos aún más firmemente. Que haya un peligro para nosotros no obsta de ser rectos y seguir la Ley; en eso consiste el heroísmo. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Por tanto, s<b>i Sócrates aceptase el ofrecimiento de sus amigos</b>, salvaría la vida, sí, pero incumpliría la ley, la violaría. Si consideramos que la ley es injusta lo que hay que hacer es tratar de convencer al pueblo de que lo es, para que con el consenso se pueda modificar; pero no tiene sentido es vulnerarla y huir. Con ello sólo se logra que el pueblo considere falso, hipócrita y cobarde a aquel que antes promulgaba el seguimiento recto de las leyes y la democracia.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Platón emplea el genial recurso de la <i>prosopopeya </i>(es decir, personificar o atribuir a los seres inanimados facultades propia de los seres humanos; en este caso las leyes hablan en boca del propio Sócrates) para explicar por qué hay que acatar las leyes:</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span>“Dime,
Sócrates, ¿qué tienes proyectado hacer? ¿No es cierto que, con esta
acción que intentas, proyectas destruirnos a nosotras las leyes y a toda la
ciudad, en lo que de ti depende? ¿Te parece a ti posible que pueda aún
existir sin arruinarse una ciudad en la que los juicios que se producen no
tienen ningún poder, sino que son destruidos por particulares y resultan
nulos?” (50b)</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><b>Los individuos no deben poseer la facultad de escoger la decisión</b>, de elegir cuál es su castigo o su responsabilidad; <b>eso atañe a las leyes</b>. Hay, pues, que obedecerlas. Uno puede acatarlas aun sabiendo que ha sido injustamente condenado, pero no por las leyes, sino por la errónea aplicación de ellas que hacen los hombres. Pero, al huir, al renegar de las leyes y de la decisión que se ha tomado en base a ellas, se genera un mal como producto de otro mal.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
"En fin, Sócrates, obedécenos a nosotras, que te hemos
criado, y ni a tus hijos ni a tu vida ni a ninguna otra cosa estimes en más
que a la justicia, para que, al llegar al Hades, puedas alegar en tu
defensa esto ante los que allí gobiernan. Pues aquí, es evidente que obrar
de tal modo ni para ti ni para ninguno de los tuyos es mejor, ni más justo
ni más piadoso, ni tampoco será mejor cuando llegues allí. Si te marchas
ahora, te vas habiendo sido condenado injustamente no por nosotras, las
leyes, sino por los hombres. En cambio, si huyes de forma tan
vergonzosa, devolviendo injuria por injuria, mal por mal, habiendo
quebrantado tus acuerdos y tus pactos con nosotras, y habiendo hecho
daño a los que menos conviene, a ti mismo, a tus amigos, a la patria y a
nosotras, entonces nosotras, mientras vivas, estaremos irritadas contigo,
y allí, en el Hades, nuestras hermanas las leyes no te recibirán bien,
sabiendo que intentaste destruirnos en la medida de tus fuerzas. Vamos,
que no te convenza Critón a hacer lo que dice más que nosotras" (54b)</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Por consiguiente, lo que tenemos con este diálogo es la <b>defensa de las leyes de la </b><i><b>pólis</b> </i>por parte de Sócrates, que acepta su propio destino marcado por ellas aun a costa de su misma integridad y para su fatal final; pero la ciudad sale ganando, porque triunfan las leyes (aunque su aplicación sea equivocada). Podemos ver aquí una cierta crítica política, en tanto que parece que la Atenas de Pericles va lentamente sucumbiendo ante otra forma de gobernar y de hacer política. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Así pues, podríamos concluir diciendo que <b>el Critón expone dos aspectos del hombre en relación con la <i>pólis</i></b>: por un lado, el ideal de perseguir la virtud en toda circunstancia, tratando de ser incorruptible, y por otro, y relacionado con el anterior, asumir las leyes de la ciudad como propias, obedecerlas y rechazar cualquier tentación (como la propuesta por Critón) de abandonar y huir para salvar la vida.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><u>Algunas ediciones <i>on-line</i> de "Critón":</u></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<a href="https://www.uv.es/arete/textos/platon-criton__traduccion_.PDF">https://www.uv.es/arete/textos/platon-criton__traduccion_.PDF</a></div>
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<a href="http://www.filosofia.org/cla/pla/azc01091.htm">http://www.filosofia.org/cla/pla/azc01091.htm</a></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-29153672834252561562020-03-21T02:34:00.001+01:002020-03-21T02:34:46.959+01:00Juan Escoto Erígena <div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjzQZfUgZGnOobhkZwvjXqxJspgrtXPry_ey01vodBokRoYRJK90O8pMHAchSeJfdu7H5-dUOpU1JAvGciPxrSRCEScetn6wwNokvPfYXO0u9PTnEhdBxEaYS60utKcgrHSnJtC/s1600/00019838.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="320" data-original-width="224" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjzQZfUgZGnOobhkZwvjXqxJspgrtXPry_ey01vodBokRoYRJK90O8pMHAchSeJfdu7H5-dUOpU1JAvGciPxrSRCEScetn6wwNokvPfYXO0u9PTnEhdBxEaYS60utKcgrHSnJtC/s1600/00019838.jpg" /></a></div>
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<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">El <b>Imperio de Bizancio</b> fue organizado y dirigido por <b>Carlomagno </b>a partir del año 768, quien se mostró tan excelso en labores de gobierno como en tareas guerreras. A la muerte del emperador, en 814, le sucedió Luis el Piadoso, el heredero del Imperio. Una vez disuelto este, y muerto asimismo Luis, en 840, el reino de Francia pasó a estar bajo mano de Carlos el Calvo, con quien se logró una importante recuperación cultural.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Hacia esos años llegaron a la corte carolingia algunas obras de "San Dionisio Areopagita" (hoy, Pseudo-Dionisio), y el profesor de la escuela palatina <b>Juan Escoto Erígena</b>, monje irlandés, las tradujo al latín por petición del emperador. Había emigrado a Francia en 1840, a los treinta años.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Erígena compuso otras <i>obras</i>: <i>Sobre la predestinación</i>, por la que casi fue acusado de herejía; un comentario a la Jerarquía celeste, del Pseudo-Dionisio, otro más acerca del Evangelio de san Juan y los cinco libros de <i><b>De divisione naturae</b></i>, su obra más relevante. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">El medievalista Étienne Gilson afirma acerca de Erígena que <b>el sentido de su doctrina es íntimamente dependiente de la relación entre la fe y la razón</b>. La naturaleza humana tiene, por deseo innato, el <b>ansia de conocer la verdad</b>. Tras el pecado original, que ensombreció la razón, sólo quedó para el hombre una "física" que únicamente le permitió conocer aspectos naturales del mundo y le hizo ver la necesidad de una causa creadora. Pero desde Cristo la razón ya no estaba huérfana, y debió acatar la verdad que le es revelada por Dios. Por tanto, <b><i>p</i></b><i><b>ara comprender la verdad es preciso creerla</b></i>, como había afirmado Isaías (y que San Agustin retomó). Ahora bien, el mismo Dios desea que ejercitemos la razón, porque la fe debe generar en nosotros el deseo de que también la exploremos racionalmente.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><b>Dios ha brindando la fe</b> al hombre, sí, pero no para que se limite a ella, sino para que sea la fuerza que sirva para desarrollar en "la criatura racional el conocimiento de su Creador". Algunos pasajes de las Escrituras cabe interpretarlos, simbólicamente, ya que para el Erígena la teología es "un tipo de poesía".</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">En una muy famosa cita de nuestro pensador, "<b><i>la verdadera filosofía es verdadera religión, y a la inversa, la verdadera religión es verdadera filosofía</i></b>". Esta expresión debe comprenderse con arreglo a lo que se acaba de decir. Y por ello mismo puede vérsele, a Erígena, tanto como un cristiano ortodoxo que como un racionalista.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">La razón debe entender lo que cree. Bien. Pero, ¿cuál debe ser el <b>método </b>para ello? Erígena nos dice que la <b>dialéctica platónica</b>. Emplearemos la doble operación de división y análisis: por la primera iremos pasando géneros universales hasta los particulares, hasta alcanzar finalmente a los individuos; por el segundo, recompondremos en unidad los géneros supremos, los cuales no son conceptos lógicos sino los propios individuos.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Escoto Erígena analiza el término <b>Naturaleza </b>y sus implicaciones en una famosa descripción. En su conjunto, la naturaleza <b>se presenta en cuatro ramificaciones</b>, como recoge en <i>De divisione naturae</i>, una obra de genuina raíz platónica, y en la que sigue a San Agustin.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><b>1-Naturaleza que crea y no es creada.</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><b>2-Naturaleza que crea y es creada.</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><b>3-Naturaleza que no crea y es creada, y</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><b>4-Naturaleza que no crea ni es creada.</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">En palabras de Nicolas Abbagnano: "La primera naturaleza crea y </span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">no es creada; y es la causa de todo lo que existe y no existe. La segunda es </span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">creada y crea; y es el conjunto de las causas primordiales. La tercera es </span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">creada y no crea y es el conjunto de todo lo que se engendra en el espacio y </span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">en el tiempo. La cuarta no crea ν no es creada, y es Dios mismo como fin </span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">último de la creación".</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">La primera <b>(1)</b> de estas naturalezas es Dios, obviamente. Es naturaleza que crea pero no es creada, y por ello es el principio de todas las cosas. La cuarta <b>(4)</b> es igualmente Dios, pero en su estadio final, de reposo, como fin de su propia actividad y de los productos que ha generado. La segunda naturaleza <b>(2)</b>, que crea y es creada, corresponde a las Ideas, al Verbo. O, más bien, son creadas porque emanan del Verbo, pero nunca existió un Verbo sin las ideas. Finalmente, la Naturaleza que es creada y no crea <b>(3)</b> son las criaturas, formadas a partir de las ideas, de las que participan, del mismo como las ideas participan de Dios.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">Pero esta división de la Naturaleza (según el Erígena, ésta es el "acto por medio del cual Dios se expresa a sí mismo") no tiene por qué implicar el <b>panteísmo</b>, pero lo cierto es que subyace una cierta identificación en este sentido. El mundo sensible sería una <i>teofanía</i>, de modo que Dios se "revela en su obra".</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Ahora bien, en la Naturaleza no todo es ser. También se incluye, de algún modo, el <b>no ser</b>. Bien mirado, todo "ser algo" es a la vez el "no-ser" de algo (porque, siendo lo que es, no puede ser otras cosas). Y, también, si "ser" es lo que podemos comprender y percibir, todo aquello que no lo sea formará parte del no-ser. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Como comenta Abbagnano, "c</span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">ircula por toda la obra de Juan Escoto el sentido del valor superior y </span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">divino del hombre. El pesimismo propio de los escritores cristianos y del </span><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">mismo Agustín sobre la naturaleza y los destinos del hombre, se atenúa en él </span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">hasta transformarse en exaltación del hombre, de sus capacidades y de su </span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">éxito final". <b>El hombre participa de todo</b>: comprende como el ángel, razona como hombre, siente como, vive como gusano, posee alma y cuerpo... De hecho, se podría ver al hombre como superior al ángel, pues posee cuerpo, sensibilidad y movimiento. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">El <b>pecado </b>es lo que aleja al hombre de Dios; si no pecase, nada le apartaría de él... y podría participar en la perfección. E</span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">l hombre es su entendimiento, y l</span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">a perfección del hombre es tan grande que ni siquiera el pecado original pudo destruirla. El hombre, con él, perdió no su naturaleza, sino su felicidad. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">La misma <b>muerte del hombre</b> es el inicio de un ascenso que le llevará a identificarse con Dios. Lo que hará será retornar al estado previo al pecado. El hombre se disolverá en sus cuatro elementos constitutivos; luego resucitará en un nuevo cuerpo; después el cuerpo será transformado en espíritu. En la última fase, la </span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">naturaleza humana volverá a sus causas primeras, que se hayan en Dios, y se moverá con él. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Pero esto no será una pérdida del hombre en Dios, sino permanecer en su verdadera sustancia, integrada en las causas primeras y subsistiendo en la perfección divina.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">El <b>mal </b>no es una realidad, sino una negación de ella. Dios no puede conocer el mal, su conocimiento debe ser creador. Todo lo que es, es pensamiento divino. Si conociera Dios el mal, el mal sería una realidad en el mundo. Pero no es nada real, ni sustancial. Lo que hace pecar no es la apariencia bella, sino la disposición del que la ve así. La pena que recaerá, tarde o temprano, en aquel que peca no es una decisión predestinada de Dios, pues ella es igualmente dolor y carencia, no realidad positiva. La pena y el pecado no se hallan en la mente divina, que sólo posee el bien y el ser. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Por tanto, <b>el mal es el pecado</b>, la carencia o ausencia de voluntad. La <b>voluntad libre</b> <b>es el libre albedrío</b>, en Erígena, al contrario que para san Agustín, quien la entendía como voluntad de bien. En nuestro autor, la voluntad libre tiene la opción de decantarse por el bien o por el mal. Sin esa capacidad el hombre no sería plenamente libre.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Con sagacidad, Erígena observa que la justicia es dar a cada uno lo suyo y que Dios reconozca a cada hombre el mérito de haber seguido sus mandatos. Pero si el hombre no pudiese hacer más que el bien, ¿qué valor y sentido tendrían esos mandatos? Dios otorgó el libre albedrío para que el hombre pudiera pecar o no pecar. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">La idea de un "<b>infierno material</b>" adonde llevar a los "condenados" no tiene cabida en un universo cuya materia ha vuelto a sus principios inteligibles. Es, dice Erígena, un residuo de superstición pagada que el cristianismo debe superar. La beatificación o condenación de cada uno tendrá lugar en su conciencia, porque la auténtica muerte es la "ignorancia de la verdad".</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><b>Juan Escoto Erígena</b> es una isla maravillosamente fresca y genuina en el pensamiento medieval, que aparece de improviso en el siglo IX, precedida de una pobreza cultural y de investigación tristemente evidentes. Fue un <b>espíritu libre</b>, de <b>gran capacidad especulativa</b>. Resulta casi, como señala Abbagnano, "un milagro" en el árido panorama filosófico de este periodo. El mismo autor italiano nos indica su relevancia: "</span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">La obra de Juan Escoto ha tenido una importancia decisiva para la </span><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">ulterior evolución de la escolástica [...]</span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;"> En </span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">la especulación posterior no hay filósofo de la escolástica que no se </span><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">relacione con él directa o polémicamente".</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">Sus análisis tratarán todos los aspectos y problemas fundamentales de la escolástica. </span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">Erígena representa, pues, <b>una mente valiente y crítica</b>, asombrosamente lúcida en un tiempo en el que, </span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">tras su muerte, l</span><span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif; font-size: large;">a cultura cristiana occidental iba a entrar, nuevamente, en un periodo de aislamiento y mediocridad.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;">(</span><span style="font-size: large;"><span style="font-family: georgia, "times new roman", serif;">Nota: Para la realización de esta entrada nos hemos basado en la </span><i style="font-family: georgia, "times new roman", serif;">Historia de la Filosofía</i><span style="font-family: georgia, "times new roman", serif;">, de Juan Carlos García-Borrón, Volumen II</span></span><span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;">)</span></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-44678761574696308992020-03-16T13:08:00.004+01:002020-03-16T13:08:52.031+01:00Avicena<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgDXSBcynZX-BvjFKdbyUC0J_Q4svruGpHYw8xI1RwzjTaBXw5Lewx_e6ODhovGUKDxkG10j6hMy6PSk3CK_TkJgX3jcapA66Q_thtx5AvTvD98KOIMQ1w7y6XI-aEuFB30uagb/s1600/BAR09706.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; display: inline !important; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="1600" data-original-width="1265" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgDXSBcynZX-BvjFKdbyUC0J_Q4svruGpHYw8xI1RwzjTaBXw5Lewx_e6ODhovGUKDxkG10j6hMy6PSk3CK_TkJgX3jcapA66Q_thtx5AvTvD98KOIMQ1w7y6XI-aEuFB30uagb/s320/BAR09706.jpg" width="252" /></a><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Uno de los más grandes filósofos musulmanes, sobretodo por su recia y maravillosa labor de sistematización del pensamiento de su época, fue el egregio <b>Avicena</b>, conocido en su tiempo como Abd Allah ben al-Hasan ben Alí Ibn Sina (o Aven Sina para los hebreos), nacido en el año 980 en el Turquestán.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Niño precoz, estudió además del Corán, humanidades, matemáticas y filosofía. Pero también fue un <b>médico muy notable</b>, y trató a célebres príncipes desde muy joven. Aunque era muy poco modesto, parece que esa cierta arrogancia era merecida. Escribió un tratado de medicina (el "<i>Canon</i>") que está al mismo nivel de importancia que las obras de Galeno o Hipócrates. De hecho, su texto traducido al latín perduró en multitud de universidades europeas hasta 700 años después. Murió el año 1037, después de una vida llena de trabajo, escritos y, al parecer, una intensa vida llena de proezas sexuales.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Hay unos <b>doscientos títulos atribuidos a Avicena</b>. Hay varias enciclopedias ("La curación", por ejemplo), que comprende los saberes de Lógica, Metafísica, Psicología, Música, Astronomía, Matemáticas, etc. El último de sus libros importantes fue "Libro de los teoremas y los avisos"), muy útil para poder conocer cómo evolucionó su pensamiento.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Hay <b>tres fuentes principales</b> de la filosofía de Avicena: <b>Aristóteles</b>, <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/search/label/Plotino">Plotino </a>y <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2009/11/al-farabi-i.html">al-Farabí</a>. En nuestro filósofo quedan conjugadas e integradas, por tanto, el aristotelismo, el neoplatonismo y las tendencias islámicas (filosóficas y religiosas). Algo que irá de perlas para el pensamiento cristiano posterior.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Avicena <b>separa las ciencias en</b> una <i>suprema</i>, o <i>filosofía primera</i> (la <b>Metafísica</b>), que estudia el ser, la sustancia y Dios; una ciencia <i>media</i> que estudia también el ser, pero aquel que, aunque existente en la materia, se le puede dar una existencia separada (la <b>Matemática</b>); y, finalmente, una ciencia <i>inferior </i>(o <b>Física</b>), que se encarga de aquellos seres realmente existentes y que sólo se relacionan con la materia.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>El ser</b> se manifiesta en las cosas sensibles, y a causa de ello es objeto indirecto de todo saber. La Metafísica se encarga de su estudio, y deja al margen cualquier aspecto accidental con el que el ser aparece en la naturaleza. A ese concepto de ser se puede llegar por intuición, en una anticipación bastante curiosa al cogito cartesiano. Si se piensa en un "yo creado" sosteniéndose en el vacío, puede reflexionar y pensar si su propia existencia está probada. Afirmará, sin duda, que existe... sin experimentar ninguna cosa exterior... ni sus manos, sus pies o lo íntimo de sus entrañas". </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">El ser <b>tiene varias formas de decirse</b>. Avicena diferencia <b>tres modos</b>: el de las cosas reales, el de su representación (abstracta) y el del signo intencional. También hay que diferenciar entre el individuo concreto y el conocimiento del ente real. Y lo no existente lo podemos conocer sólo al concebirlo mentalmente, de modo que le atribuimos predicados que hacen referencia a alguna realidad, pero sin que se relacione con ningún objeto externo.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Suele decirse, por lo que atañe al <b>problema </b>medieval escolástico de la distinción entre <b>esencia-existencia</b>, que Avicena consideraba a la segunda como un accidente de la primera. Pero, en realidad, lo que afirmó es que, más allá de Dios, la existencia es un complemento, algo que acompaña de forma no-necesaria a las esencias. Ahora bien, la Creación es necesaria, puesto que si Dios es el ser-necesario, necesarios han de ser también sus atributos, y entre ellos, el más notable es el de Creador.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>Las cosas</b> son posibles. No siempre tienen la existencia. No siempre son necesarias; si lo son es por la acción de una de una causa exterior (Dios). Por tanto, a las cosas les puede faltar la existencia. Sin embargo, a Dios no, pues Éste es necesario <i>per se</i>, ya esencialmente existente, y en Él no hay la menor amalgama entre la existencia y la esencia.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Otro de los aspectos importantes que Avicena analizó es el del <b>entendimiento</b>, que constituye el sujeto de la más elevada actividad del alma humana. El "intelecto" se dice de muchos modos, al igual que el ser. Sería, para nuestro pensador, algo similar la salud mental o la lucidez, virtud que permite separar lo "bello de lo "feo", como el mismo Avicena comenta. También el entendimiento serían esos conocimientos universales que el hombre va adquiriendo, a través de la experiencia, y que brindan eficacia a la hora de decidir y actuar.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">De entre todos los tipos de <b>intelecto</b>, el <b>Agente</b> es aquel que permite que el intelecto humano pase de la potencia al acto. Avicena establece una analogía con el Sol: "Lo mismo que el Sol es por sí visible y es a la vez causa de la visión, así el Intelecto Agente es por sí inteligible y además es causa de la intelección". </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Hay un </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">entendimiento en potencia en cada hombre individual, pero sólo uno del tipo Agente para toda la especie, en forma separada o inteligente, y a la que Avicena, por extraño que parezca, hace corresponder a la "esfera de la Luna".</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Para Avicena, <b>el mal</b> es privación en el nivel ontológico, tiene su correspondencia con la ignorancia en el ámbito del conocimiento, y con la flaqueza dentro del orden moral. Además, este mal se opone al bien, y puede ser causa de la destrucción del orden y la perfección a la que cada ser debe encaminarse. Nuestra acción puede que sea un bien para nosotros, pero quizá sea un mal en otro. En el mundo de la materia, en la "generación y corrupción", el mal es inevitable; para evitarlo, el ser humano debe hacer un gran esfuerzo racional. Pero lo que hace "malos" nuestros actos es lo "inadecuado" de nuestras decisiones. Todo dependerá, en última instancia, de lo acertada que esté nuestra razón a la hora de guiar nuestros actos; y esta debe ser guiada, para lograrlo en su máxima expresión, por la acción iluminadora del Intelecto Agente.</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>El ser humano</b> <b>tiende </b>por naturaleza <b>a vivir en sociedades</b>, lugares en donde la vida humana logra su máxima eficacia. Pero no todas las personas han sido "iluminadas" del mismo modo, por lo que quienes poseen más conocimiento racional deben ir guiando a los que tienen menos. Se debe acatar una ley que vele por el orden y dé realización a los deseos y necesidades de cada uno. Esta Ley debe basarse en principios necesarios e inmutables, y para Avicena está claro que esta Ley debe corresponder al Corán. Ahora bien, este texto ofrece únicamente los principios generales de actuación; deben ser los gobernantes los que administren su aplicación en los distintos ámbitos prácticos de la sociedad. Todo gobierno, para ser legítimo, debe basarse siempre en la libre elección y consenso del pueblo. En caso contrario, es decir, si el poder se adquiere por la fuerza o el dinero, el pueblo (o cualquier ciudadano) puede (es más, debe) alzarse contra el tirano (y, llegado el caso, incluso matarle). Lo mismo sucede si el gobernante carece de la capacidad o el talante propio de alguien de su nivel, o si por sus decisiones lleva al desastre al pueblo. </span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">En resumen, lo que <b>Avicena proporciona es un marco combinado de conocimiento natural y saber revelado</b> (que será adoptado más tarde por la escolástica cristiana) <b>por medio de la especulación racional</b>. El fin de ello es demostrar que la razón y la revelación, aunque sigan caminos distintos, conducen a un mismo lugar y objetivo: a la misma verdad. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">(Nota: Para la realización de esta entrada nos hemos basado en la <i>Historia de la Filosofía</i>, de Juan Carlos García-Borrón, Volumen II)</span></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-90228944957369460162020-01-12T12:58:00.000+01:002020-01-12T22:35:55.634+01:00La Academia Nueva: Carnéades de Cirene<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg52ShOfOMDM0Z8pztCavqu_pTZ1nxuyxHQNw3_tDGZYGBBSJm-bAJg9TuWuJxkOXVG3ei5xmk4CC-ayEdTt7kgpAHAjEdJ5uR6vKYTCEfYrTK5Lxj_RdMdDmpCnSIdxo_br-Wh/s1600/DifTYgmWAAActtJ.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1200" data-original-width="721" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg52ShOfOMDM0Z8pztCavqu_pTZ1nxuyxHQNw3_tDGZYGBBSJm-bAJg9TuWuJxkOXVG3ei5xmk4CC-ayEdTt7kgpAHAjEdJ5uR6vKYTCEfYrTK5Lxj_RdMdDmpCnSIdxo_br-Wh/s320/DifTYgmWAAActtJ.jpg" width="192" /></a></div>
<br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>Carnéades</b> nació en Cirene, se supone que hacia el 219 (o 214) antes de Cristo. Diógenes el Babilonio, estoico, y el académico Hegesino fueron sus antecesores en la Academia. Carnéades fue alumno de este último y entró como escolarca en el año 156 antes de Cristo. Admiraba mucho a Crisipo (llegó a decir que, sin Crisipo, él no sería nada), y en una ocasión en que tuvo que defender un discurso en Roma acerca de la actuación de Atenas sobre el saqueo de Orope, Carnéades estuvo tan brillante que sorprendió a la audiencia (sobretodo la más joven). La estancia de Carnéades en Roma, junto a su antecesor Diógenes y el peripatético Filolao, tuvo un gran impacto en la capital, y según comenta Ferrater Mora, fue "uno de los hechos decisivos en la historia de la influencia del pensamiento griego sobre el mundo romano".</span></div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Carnéades tenía una facilidad y un talento innatos para revelar todos los aspectos opuestos y contradictorios de los asuntos, incluidos los morales, de modo que se granjeó la enemistad del romano Cratón, que aun siendo tolerante hasta cierto punto no podía admitir en la ciudad a un escéptico capaz de "corromper" a las generaciones jóvenes. Así que terminó expulsándolo de Roma.</span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Se acepta generalmente que Carnéades, junto a su estimado Crisipo, fue uno de los más importantes filósofos de la época que media entre Aristóteles y Plotino. Su potente oratoria provocaba huidas (literalmente) en sus adversarios en cuanto lo veían llegar. Hacia el final de su vida las enfermedades y la ceguera minaron el ánimo de Carnéades. Murió el año 129, y como quiera que por entonces aconteció un eclipse total de Luna, algunos afirmaron que el astro se había retirado en señal de duelo. Clitómaco, discípulo de Carnéades, fue quien difundió las enseñanzas de su maestro, el cual nunca escribió nada. Dichas enseñanzas se pueden resumir en tres pilares:</span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<b style="font-family: georgia, "times new roman", serif;"><span style="font-size: large;">1-Teoría de la certeza.</span></b></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">
</span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Cuando hicimos la nota acerca de Arcesilao, mencionamos que los estoicos aceptaban la "representación comprensiva". Carnéades, igual que el escolarca de la Academia Media, se niega a aceptar ese criterio, porque él también entiende que nuestros sentidos nos engañan y que cualquier percepción que tenemos es subjetiva. Sólo podemos, por tanto, fiarnos de aquello que consideramos como "probable", aquello "verosímil", porque lograr un alcance crítico definitivo de una impresión exterior es harto complicado. Carnéades retoma el ejemplo clásico de la "paradoja sorites": al enumerar los números, ¿cuándo termina lo "poco" y empieza "lo mucho"? ¿Cuándo un montón es tal, partiendo de un grano y sumando grano a grano? Es decir, ¿cuándo una modificación cuantitativa supone una modificación cualitativa? No podemos dar una explicación fehaciente de hechos tales, por lo que los conceptos y las impresiones que los sustentan no pueden ser la base para comprender el mundo.</span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Carnéades apeló a la influencia que causan en nosotros las representaciones de los sueños, y aquellos estados de alucinación e ilusión. No podemos, por otro lado, probar nada, puesto que cada prueba consta de aserciones, las cuales deben a su vez probarse y... así, hasta el infinito.</span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>
<br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"></span><br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Así pues, si deseamos ser sabios, hay que suspender el juicio, pues nada es cierto. El sabio no puede ni debe afirmar nada, sino limitarse a aquello que es probable. Lo legítimo es ceñirse a lo verosímil. </span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>
<br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"></span><br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>2-Teodicea estoica.</b></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Otro de los ámbitos de la crítica de Carnéades a la escuela estoica fue su teología, según la cual los dioses eran "seres vivientes que rigen el desarrollo del tiempo del mundo" (Jean Brun, </span><i style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: x-large;">La Filosofía antigua</i><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">, Siglo XXI, Madrid, obra en la que nos basamos para esta nota). Lo que sucede, la Providencia, rige el transcurso de la estructura del mundo, y hay que aceptar tal y como llega ese destino, hay que someterse a él y amarlo. Pero, aduce Carnéades, si todo sucede por voluntad divina, todo lo malo y pernicioso del mundo también es producto de ellas. Enfermedades, hambre, fenómenos naturales... </span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Cicerón recoge la opinión de nuestro filósofo al respecto: "Si todo sucede por causas antecedentes, los acontecimientos están ligados entre sí por un estrecho encadenamiento natural. Si esto es así, la necesidad lo produce todo y nada está en nuestro poder". Pero, sea como fuere, "nada es verdadero desde toda la eternidad y nadie puede conocer los acontecimientos futuros con una verdadera certeza" (Jean Brun, <i>op. cit.</i>). </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Por ello, aunque los estoicos estimaban igualmente la adivinación, nuestro pensador la desprecia como una mera "superstición".</span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Además de todo ello, las pruebas aducidas a favor de la existencia de Dios por parte estoica no eran concluyentes, y la naturaleza de ese mismo Dios era una doctrina llena de antinomias, a juicio de Carnéades.</span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>
<br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"></span><br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Así, aunque haya un consenso universal acerca de al existencia de Dios, lo que se prueba con ello es que hay una "creencia generalizada en Dios", pero no que Dios mismo exista. Igualmente, los estoicos sostienen que el Universo es "sabio y razonable". Pero, ¿en qué se basan? Para que lo sea, debe probarse que está "animado" (extremo que aquellos no logran). Si la razón humana procede de una Razón universal, tienen que "probar que el espíritu humano no puede ser un producto espontáneo de la naturaleza" (Frederick Copleston, <i>Historia de la Filosofía</i>, vol. 1, Ariel). Y, naturalmente, si el Universo es producto de un designio, realizado con arreglo a un plan, entonces no cabe duda de que tiene que haber un autor de dicho plan. Sin embargo, la dificultad precisamente estriba en saber si el Universo fue producido conforme o no a un plan. Porque, pregunta Carnéades, ¿no podría ser el resultado de un efecto casual o fortuito de las distintas fuerzas naturales?</span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>3-Moral.</b></span></div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">La moral de Carnéades, basada en los dos puntos anteriores (a fin de cuentas, el conocimiento [o desconocimiento] de los hechos debe ser lo que influya en nuestro comportamiento), "parece que se ha contentado con ser un arte de vivir lleno de prudencia" (Brun, </span><i style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: x-large;">op. cit.</i><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">). Nuestro escolarca aprehendió la fórmula: </span><i style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: x-large;">voluptas com honestate</i><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">, es decir, "el placer con la honestidad". El sabio posee una suerte de inclinación natural hacia la búsqueda de los bienes naturales, de modo que la puede emplear como criterio práctico para su vida. Pero hay que huir del dogmatismo, de la cerrajón mental y orgullosa de los estoicos, quienes se vieron obligados a analizar y precisar sus doctrinas ante el ataque sin cuartel de Carnéades, un hueso muy duro de roer en lo que atañía a cuestiones de argumentación.</span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Las doctrinas de Carnéades, como hemos comentado, fueron difundidas por su alumno Clitómaco, que se hizo cargo de la Academia a la muerte de su maestro.</span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-39135673239256730782020-01-01T23:32:00.000+01:002020-01-01T23:32:11.777+01:00Libertad de expresión sin libertad de pensamiento<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiCiWUuZB3Vfgwsxjjkgf2IW_yK2Byfh8pttKzNsnhhcD1wkYfGJ_qMKYsNGb8w2T3-elm2PCNwSFejcfh8cLkZTtGZF61cxuUVNcKAeUwZc6FVsYRjlACWAfYoooUjt5sh-CKE/s1600/65062d0587f08c1015d255115d1fbe12.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="566" data-original-width="720" height="251" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiCiWUuZB3Vfgwsxjjkgf2IW_yK2Byfh8pttKzNsnhhcD1wkYfGJ_qMKYsNGb8w2T3-elm2PCNwSFejcfh8cLkZTtGZF61cxuUVNcKAeUwZc6FVsYRjlACWAfYoooUjt5sh-CKE/s320/65062d0587f08c1015d255115d1fbe12.jpg" width="320" /></a></div>
<br />elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-30025055071314107232019-12-22T10:58:00.000+01:002020-01-12T22:37:10.149+01:00La Academia Media: Arcesilao de Pitania<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgZOHvGeqMg0PqmgrQ1J10h7wdWYoQ85pWAPVX9EsQzcFyQ5xaqdyyo-g5aS0bARFgS2Ztn43DKFfrWpE8buW0ZoNcFFoPvVb2JQrNeDj2xlj2bB893irjrw875DCmuy-qEfAPo/s1600/Arcesilaus_and_Carneades.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="720" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgZOHvGeqMg0PqmgrQ1J10h7wdWYoQ85pWAPVX9EsQzcFyQ5xaqdyyo-g5aS0bARFgS2Ztn43DKFfrWpE8buW0ZoNcFFoPvVb2JQrNeDj2xlj2bB893irjrw875DCmuy-qEfAPo/s320/Arcesilaus_and_Carneades.jpg" width="320" /></a></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">La Academia Antigua, cuyos notables miembros <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2019/10/la-academia-antigua-espeusipo.html">Espeusipo </a>y <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2019/11/la-academia-antigua-jenocrates.html">Jenócrates </a>tratamos en notas anteriores, tuvo también como escolarca a Polemón de Atenas, sucesor en el cargo de aquel último. Libertino y habitualmente borracho, Polemón cambió radicalmente su vida al conocer a Jenócrates, despreciando el dolor y viviendo en arreglo a la "naturaleza".</span></div>
<br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Hubo asimismo un discípulo de Polemón, Crantor de Soles, cuya obra <i>Sobre el duelo</i> fue una especie de "Consolación de la Filosofía" de la época antigua; Crates de Atenas, por su parte, fue el encargado de dirigir la escuela cuando Polemón falleció, y quedó constancia del aprecio que sentía por todos sus antecesores.</div>
</span><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Aunque hay autores que encuadran a Arcesilao, nuestro personaje hoy, dentro de la Academia Nueva, nosotros recogemos la división de Diógenes Laercio y lo ubicamos en la <i>Academia Media</i>.</div>
</span><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
<b>-Arcesilao de Pitania.</b></div>
</span><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Fue el sucesor, a su vez, del propio Crates, en la Academia cuando murió este en el año 268 antes de Cristo. </div>
</span><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
En aquella época convivían multitud de distintas orientaciones filosóficas, que cristalizaban en diversas escuelas: platónicas (la Academia), aristotélicas (el Liceo), la escéptica de Pirrón de Elis, el estoicismo y el epicureísmo. Arcesilao fue muy amigo de Pirrón, del que recogió abundantes influencias, pero aunque hay quienes quisieron ver una unidad entre ambas (la Academia Nueva y el escepticismo), Arcesilao siempre se vio y se definió cómo académico, y además hubo escépticos que llegaron a despreciarle y hasta insultarle por sus ideas.</div>
</span><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Arcesilao nació en el año 315 antes de Cristo, estudió Matemáticas y quedó prendado de la filosofía, admirando mucho a Teofrastro y Platón. Era notablemente rico y Diógenes Laercio dice de él que llevó una vida de placeres con cortesanas y disipaciones varias. Sin embargo, aunque en la época los filósofos solían ser pobres, Arcesilao no hacía gala de su fortuna sino que se mostraba muy generoso. Al parecer, era bastante guapo, y tenía dones oratorios muy relevantes.</div>
</span><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Al contrario que muchos de sus contemporáneos o antecesores, Arcesilao no escribió nada. En él recobró vigor el olvidado arte de la dialéctica, y el dogmatismo platónico fue sustituido por la sana discusión, la cual llevaba a la conclusión de que la verdad no nos es posible alcanzarla (muy en la línea, naturalmente, del escepticismo). Sin embargo, este escepticismo no es ontológico, por así decir: Arcesilao seguramente no dudó de que existiera la verdad, una verdad en sí misma, que sin embargo no la podemos obtener por falta de capacidades. Por tanto, son nuestras limitaciones las que nos impiden llegar a la verdad, no au ausencia.</div>
</span><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Arcesilao mantuvo una contundente discusión con la escuela estoica y con Zenón de Citio, en particular, en relación con el criterio para llegar (si es que se puede) a la verdad. Para Zenón dicho criterio estaba en las "representaciones comprensivas", es decir, aquellas en las que lo que es representado y lo que se representa están en armonía. En estas representaciones se basa el "asentimiento" del alma, a partir del cual es posible la "comprensión". Pero Arcesilao entendía que no había forma de diferenciar entre una representación comprensiva y otra que no lo es, porque los sentidos no brindan un punto de partida lo suficientemente sólido como para llevarnos a descubrir la verdad. Hay objetos sin existencia que nos producen igualmente impresiones claras y distintas en nuestra mente. En realidad, la representación comprensiva ni siquiera existe, de modo que no hay certeza ni ciencia posible. A lo sumo, el sabio (que es quien, supuestamente, alcanza aquellas representaciones), otorga un juicio, una opinión.</div>
</span><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Pero si únicamente podemos alcanzar juicios, entonces la razón no sabe nada, y no nos es posible poseer un criterio de verdad. Ni la razón ni los sentidos, en efecto, ayudan para lograr este objetivo, puesto que no existen las representaciones evidentes sobre las que asentarnos. Un juicio no es más que una aproximación subjetiva y tosca a lo que pensamos que debe ser lo real o lo existente, por lo que solo cabe suspender el juicio, pues este no llegará jamás a ser la verdad. </div>
</span><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Sin embargo, ¿suspender el juicio no es equivalente a no aportar ni discurrir nada? Arcesilao reconocía que, para no estancarse, en lo mental o en las acciones, es necesario un "criterio de acción". Este criterio, pensaba, lo podemos entender como "lo razonable", entendiendo esto como una serie de acciones concordantes entre sí que forman un todo coherente y que se puede justificar. Hay, pues, que examinar los puntos a favor y en contra a la hora de realizar un acto, de modo que podamos dar razón a nosotros mismos y a los demás de por qué hemos obrado así.</div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Aquí radica, por tanto, una diferencia fundamental entre Arcesilao y los escépticos "clásicos": suspender el juicio (la epojé, que miles de años después recuperaría la fenomenología) no es equivalente a llegar a un punto de indiferencia o innacción. </div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Los escépticos pirronianos solían mostrar desconfianza (cuando no abierto y duro desprecio) por las opiniones; pero los académicos como Arcesilao no llegaban a ese extremo, sino que las consideraban y, pese a rechazarlas, eran indulgentes con ellas. Era, así, una escuela más respetuosa y abierta, aun blandiendo su natural escepticismo.</div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Arcesilao murió en el año 240 antes de Cristo, aproximadamente. Sus sucesores al mando de la Academia fueron hombres de los que no sabemos casi nada, pero uno de ellos, Hegesino (o Hegesilao), fue el maestro del próximo escolarca de renombre, Carneades de Cirene, a quien conoceremos en la siguiente nota.</div>
</span>elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-2242872903742927602019-12-11T23:36:00.000+01:002019-12-11T23:36:33.492+01:00La filosofía que debería ser<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEifOwNmdjJSXZkUllhnedpIWrn7vK3zdMU9DrurHOMCItZt71cTE7oIMzwEjrQ_1yJ46gx2Az_G_HwyKLWokpORFfXu3VGnZTypNW80RcyQNLmM0Avn375-wqEL0PSXw2lkL1xY/s1600/78551925_420298275578545_7803364932929454080_o.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="960" data-original-width="685" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEifOwNmdjJSXZkUllhnedpIWrn7vK3zdMU9DrurHOMCItZt71cTE7oIMzwEjrQ_1yJ46gx2Az_G_HwyKLWokpORFfXu3VGnZTypNW80RcyQNLmM0Avn375-wqEL0PSXw2lkL1xY/s400/78551925_420298275578545_7803364932929454080_o.png" width="284" /></a></div>
<br />elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-14184397547976335652019-12-11T23:33:00.002+01:002020-01-12T13:02:16.973+01:00La "Generación del 98" en la Filosofía Española<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiDSTRjGMU-TJ1xytyTCLjv698Nx4BKPlJrlRo-37CdXOvXM2F6a3M6aDxn0CVV1wdyxBBm2w_ZKl9HcLnAV6vNVVOLdPEzti-zadcljn4__Ks8CtYq2wUPza5WMqhPQyY7Fp4k/s1600/Generaci%25C3%25B3n+del+98.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="230" data-original-width="705" height="129" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiDSTRjGMU-TJ1xytyTCLjv698Nx4BKPlJrlRo-37CdXOvXM2F6a3M6aDxn0CVV1wdyxBBm2w_ZKl9HcLnAV6vNVVOLdPEzti-zadcljn4__Ks8CtYq2wUPza5WMqhPQyY7Fp4k/s400/Generaci%25C3%25B3n+del+98.jpg" width="400" /></a></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Aunque solemos identificar a los escritores de la famosa "<b>Generación del 98</b>" española con la práctica literaria "pura", es decir, la creación de historias y personajes, no es menos cierto que muchos de ellos vivieron en una época de crisis (la llamada "<b>crisis de fin de siglo</b>", entre 1898 y 1905), un tiempo en el que empezó a replantearse lo que significaba ser "español", con el resultado de tensiones y búsquedas. Además, con el cambio de siglo España inició una modernización, largo tiempo esperada, sobretodo en los ámbitos culturales (ciencia, filosofía, literatura y política), más que en los propiamente sociales o económicos.</span></div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
En este tiempo se suman, a los movimientos intelectuales vigentes, otros muchos (modernismo, novecentismo, casticismo, etc.). Su núcleo común es que son <b>decididamente antipositivistas</b>, es decir, tienen una postura contraria a (o de desconfianza ante) la ciencia, y mucho más abierta a lo espiritual y místico. Estas corrientes abonan el terreno para la llegada del vitalismo y el irracionalismo. Francia fue el motor difusor del irracionalismo (en su vertiente "modernista"), en la que destacan la actitud de libertad y de innovación. </div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
El Modernismo español quiere traer consigo un <b>replanteamiento de aspectos, valores y opiniones</b> que se han considerado absolutas o indiscutibles, pero que son los causantes de abocar al país a la decadencia. Esta rebeldía se articula en tres ramas: rebeldía estética contra el naturalismo, filosófica contra el positivismo y rebeldía social contra la burguesía acomodada. Tales rebeldías cristalizan y subyacen a una fundamental: la metafísica, por cuanto cabe entender que el hombre no es, ni puede ser, Dios.</div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Los intelectuales modernistas quieren incorporar a España al "mundo moderno", por medio de una <b>radical renovación del espíritu nacional</b>. Y la mejor forma de expresar artísticamente esta ansia, subjetiva, romántica y lírica, es por medio de la poesía y en ensayo. </div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Dentro de España el modernismo se encuentra con el casticismo, en donde el primero destaca por la preocupación estética, la renovación y el espíritu cosmopolita, mientras que el segundo siente más apego por la historia, la tradición y la religión dominante.</div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
El <b>modernismo religioso</b> en España gozó de un ambiente favorable. Tanto los krausistas como el catolicismo liberal predicaban una religión humanitaria y carente de dogmas, universal y sin un el autoritarismo jerárquico tan propio de las religiones tradicionales. El modernismo religioso bebió de estas fuentes y recoge lo mejor de ellas: predominio del sentimiento, la conciencia, lo suprasensible, el agnosticismo (impensable en aquellas religiones del Libro) en cuanto a las realidades trascendentes, la tendencia subjetiva, etc.</div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Pero el anhel0, por parte de los intelectuales españoles, de poder unificar y conciliar la fe y la razón, la religión y la ciencia, quedó destruido cuando la autoridad eclesiástica consideró herético al el catolicismo liberal, del que derivaba el modernismo religioso, como hemos dicho. Si el catolicismo tradicional quiso parar los pies al liberal (y, por añadidura, al modernista) fue porque desarrollaba la autonomía de la conciencia, porque incidía en la separación del Estado y la Iglesia</div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Pero, ¿<b>qué es la Generación del 98</b>? Es un grupo de pensadores y escritores que vivieron en primera persona la crisis del 98, es decir, la pérdida de las últimas colonias de ultramar, que ponía el cierre definitivo al poder español más allá de la Península. <b>Todos ellos compartían</b> la necesidad de una renovación, de <b>modernizar el país</b>, de conectarse con las corrientes intelectuales europeas y de frenar la clara decadencia y abandono cultural en la sociedad española de la época. Parece que el corazón de este movimiento lo configuran <b>Ángel Ganivet, Azorín, Pío Baroja, Ramón del Valle-Inclán, Antonio Machado, Ramiro de Maetzu y Miguel de Unamuno</b>. Fueron pesimistas y mostraron su desencanto en general ante la democracia de la época (una democracia falsa y de turno de partidos sin el menor reflejo del interés real de la sociedad).</div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
Desean todos, pese a las indudables diferencias y a la evidente heterogeneidad entre ellos, <b>dar carpetazo al positivismo y renovar el arte, la ciencia y la religión</b>. La belleza interesa a los modernistas del 98, no por ella misma, sino como medio de transformación de la realidad social y política y, por tanto, humana. La diferencia de estos hombres de la Generación del 98 con los otros, los "modernistas puristas", es que estos ansiaban una recuperación y revalorización de la literatura, pero sin entrar a juzgar el estado de decadencia del país en el que vivían; era como querer instalarse en un cierto 'academicismo', en su propia torre intelectual, y no interesarse por lo que les rodeaba. Pero la Generación del 98, si bien tenía el mismo gusto por el esteticismo y el idealismo, lo empleaban para vehicular su sensibilidad ante el problema de España. Quieren soluciones, y sostienen que estas vendrán por el conocimiento de la historia y por la lectura de los clásicos.</div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Pero aquí se manifiesta la intención lírica y subjetiva de estos literatos: no quieren investigar el mundo desde la sociología, sino a través de la observación histórica y literaria, que les conducirá hasta al lirismo y la ensoñación. No hay propuestas concretas (casi no pueda haberlas, se trata de escritores idealistas), y tratan de encontrar "dentro", en nosotros mismos, en nuestra vitalidad, la fuerza para culminar la España "ideal", como merece nuestra historia y tradición.</span>
</div>
</span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
En la próxima nota veremos algunos de los principales representantes de la Generación del 98 y sus intereses particulares. A Miguel de Unamuno, por su parte, le dedicaremos una serie especial.</div>
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<span style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><div style="text-align: justify;">
(Para esta nota nos hemos basado en las páginas de <i>Historia de la Filosofía Española Contemporánea</i>, de Manuel Suances, Síntesis, Madrid, 2010)</div>
</span>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-32514842508019671282019-11-13T00:40:00.000+01:002019-11-13T00:40:16.250+01:00'Diálogos' de Platón (III): "Protágoras"<img alt="Protágoras" src="https://editorial.csic.es/portadas/libros/11162/11162_290.jpg" /><br />
<br />
<div class="Prrafodelista" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify; text-indent: -18pt;">
<b style="text-indent: -18pt;"><span style="background-color: white; font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: 12pt;">-</span><span style="background-color: white; font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">Diálogos de Platón: </span></b><b style="text-indent: -18pt;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><i style="background-color: white;">Primera Etapa: Socrática o de juventud (393-388 antes de Cristo)</i></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="font-size: 13px; margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">-<i><a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2015/12/dialogos-de-platon-apologia.html">Apología de Sócrates</a></i>: una defensa del maestro de Platón, condenado a muerte por la democracia ateniense.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">-<i>Critón</i>, o del deber, en el que Sócrates rechaza escapar de la cárcel<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">-<i>Ion</i>, mención a un rapsoda homérica, que canta sobre la Ilíada y reflexiona sobre la inspiración poética.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">-<i>Lisis</i>, diálogo referido a la amistad.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">-<i><b>Protágoras</b></i>, que discute sobre los sofistas y su forma de dialogar y metodología.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">-<i>Laques</i>, cuyo título hace mención a un general, en el que se trata del valor.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">-<i>Cármides</i>, que trata sobre la sabiduría moral.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="background-color: white; font-size: large;">-<i>Eutifrón</i>, diálogo que estudia la piedad y si es adecuada o no la acusación.</span><span style="background-color: white; font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="font-size: 13px; margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="font-size: 13px; margin: 0cm 0cm 0.0001pt 18pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><b><i>"PROTÁGORAS"</i></b>:</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">El diálogo que traemos hoy a estas páginas es, sin duda, <b>uno de los más bellamente escritos</b> por Platón, y uno de los que, por tanto, más grato es leer. Y cabe decir que hay que hacerlo; hay que leerlo porque estamos ante una obra no sólo de pensamiento filosófico, o de puesta en práctica del método (socrático) de filosofar, sino también como modelo de texto con una habilidad y capacidad expresiva extraordinarias.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: large;">El "Protágoras" <b>se incluye en el periodo socrático</b> o de juventud de Platón, aunque no es el primero en ser escrito, como algunos </span><span style="font-size: large;">sostienen. Pero sí presenta a un Sócrates "clásico", original, por así decirlo: se dedica aún a reflexionar sobre cuestiones éticas y siguiendo su método de ir cuestionando a su interlocutor hasta hacerle reconocer las fallas de su pensamiento. No hay teoría expuesta, ni una doctrina estructurada, sino un discurrir, una dialéctica en pos de la verdad.</span></span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Pero, también como es usual en los diálogos socráticos, la conversación recogida llega a <b>un final abierto</b>, sin una respuesta definitiva. Esto, lejos de esgrimirse como una carencia del método socrático, sirve sin embargo para reconocer que el saber de los interlocutores interpelados era, en realidad, insuficiente o falso.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span>
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">La <b>idea central del diálogo</b>, lo que mueve a su realización, no es, como en otros anteriores, cuál es ésta o aquella virtud, sino una pregunta más general: <b>la virtud</b>, la noción de <i>areté</i>, es decir, de la excelencia, <b>¿se puede enseñar? </b></span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span>
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">En otras palabras, ¿puede alguien aspirar a lograr la excelencia moral? Fue este un <b>tema de gran actualidad e importancia en la Grecia ilustrada</b> que brindó Pericles, y en donde los sofistas (como el que da título a este diálogo) pugnaban por ofrecer sus servicios didácticos a quienes pudieran costeárselos.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span>
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><b>Sócrates desconfía</b>, al inicio del diálogo,<b> de la posibilidad de que la excelencia pueda ser enseñada; Protágoras</b>, por su parte,<b> lo considera obvio y probado.</b> Sin embargo, <b>a la conclusión</b> del mismo <b>los papeles se invierten</b>, y es el sofista quien no ve nada clara su realización, mientras que el maestro de Platón reconoce que, si como parece ser, la excelencia es conocimiento, entonces puede ser enseñada. La falta de contundencia en la postura final de ambos interlocutores deba abierta la cuestión para que, en un futuro, se la examine con mayor profundidad.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span>
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Puede que, al leer el diálogo, tengamos la impresión de que decepciona o frustra ver el modo como lleva Sócrates la discusión. Pero vemos claramente, al menos, que ambos tienen un objetivo distinto, y un modo de filosofar igualmente diferente.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: large;">Si t</span><span style="font-size: large;">oda virtud es un saber o ciencia del bien, como parece obvio, desde la perspectiva socrática, y dado que la ciencia lo que hace es enseñar, entonces tendría que ser posible enseñar la virtud. Lo curioso es que el mismo Sócrates, aún afirmando que sea ciencia, nos dice que no es enseñable, y Protágoras pretende enseñarla aún sin concebirla como una ciencia. Pero si la virtud es "la</span><span style="font-size: large;"> ciencia intuitiva de los valores y del bien", entonces sí se podría enseñar, aunque deberían hacerlo los filósofos, dado que esta ciencia en realidad, no es otra cosa que la misma filosofía.</span></span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Protágoras será un <b>diálogo</b>, pues, <b>primerizo, iniciático, que va a perfilar algunas cuestiones</b> que, más adelante y ya sin el sustrato epistemológico de Sócrates, Platón irá reabriendo y analizando. Por ejemplo, el tema de la virtud como conocimiento lo tratará en el Menón (dentro ya de la etapa de Transición); y en el Gorgias nos hablará de los sofistas y cómo enseñan y cómo influye en la sociedad, haciendo una crítica mucho más severa. Platón, por descontado, elaborará un complejo proyecto filosófico en el que tanto la ontología, como la psicología, la ética o la política se hallan entrelazados y forman parte de una misma unidad global.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span>
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Pero, en este diálogo, lo que se nos muestra es la todavía clara figura del maestro platónico en su faceta de dialogador por las calles, que a todas luces parece ser una representación fiel y ajustada a la realidad de como era el viejo ateniense. Sabedor de su ignorancia, del famoso adagios "sólo sé que no sé nada", exhibe una simpatía y una sencillez que contrasta con la resabida "chulería" de los sofistas.</span></span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: large;">Desde el punta de vista literario, e</span><span style="font-size: large;">l Protágoras "<b><i>es
uno de los diálogos más animados, más teatrales y brillantes de Platón</i></b>", como comenta Guthrie en su comentario a esta obra platónica. Quizá únicamente le superan unos pocos diálogos en su etapa de plena madurez, como son el Fedón, el Banquete y por supuesto la República.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: large;">Platón describe a Protágoras con más respeto que a otros sofistas, no en vano es uno de los ideólogos de la democracia de Atenas. Platón lo muestra "como</span><span style="font-size: large;"> un conversador atento, inteligente,
con una doctrina bien asentada en tesis moderadas e
ilustradas, al que los ataques dialécticos de Sócrates
acaban por poner en un brete. No hay en él esa fatua
vanidad de otros interlocutores ni es un sofista que desdeñe la influencia moral de sus enseñanzas. Es una
figura extraordinariamente simpática que sufre la acometida del interrogatorio socrático con notable paciencia y con una excelente buena educación" (Carlos García Gual, en su <i>Introducción </i>a la edición de <i>Protágoras</i>, en Gredos, 1992, Madrid, y cuyas notas nos sirven de base para la presente). </span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: large;"><b>La estructura del </b></span><span style="font-size: large;"><b>«Protágoras» es casi de pieza dramática</b>. Podríamos hablar de un primer y segundo "acto" (los enfrentamientos dialogados de Sócrates y Protágoras), y sumarles como acompañamiento las aportaciones del resto de los asistentes. </span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span>
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Un <b>pequeño resumen</b> del diálogo podría ser el siguiente. Partimos de la pregunta inicial: "¿qué es un sofista y qué se supone que es lo que enseña?". Platón presenta a un joven, el ingenuo Hipócrates (no se trata del médico, por supuesto), que va a despertar a Sócrates, Entre ambos se entabla un diálogo en el que el entusiasmo del joven contrasta con el aplomo del maestro. Sócrates advierte al muchacho que los sofistas, como Protágoras al que van a ver, son como "traficantes de los alimentos del alma". Es un modo de precaver al chico, que no se deje llevar por los cantos de sirena, o por la manifiesta capacidad de persuasión de los sofistas. </span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span>
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><b>Protágoras aparecerá</b>, por el contrario, <b>como un profesor orgulloso, que pretende enseñar la ciencia política</b> y convertir en mejores a los hombres, hacerlos ciudadanos. Sócrates dudará, entonces, acerca de si esa <i>areté </i>puede enseñarse realmente. Protágoras iniciará un largo discurso en el que muestra su elocuencia y concluirá afirmando que todo hombre está capacitado para participar en la vida política, y éstas capacidades se pueden mejorar con la enseñanza, de la que los sofistas son maestros, no sin antes haber manipulado el mito de Prometeo para sus propios fines.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: large;">Sócrates retomará, tras una irónica incursión en los poetas griegos y sus enseñanzas y en la que también hace una interpretación interesada y forzada de un texto lírico griego (un poema de Simónides de Ceos), el tema de la unidad de la virtud y de si tiene fundamentación en el conocimiento, es decir, si se puede convertir en ciencia. <b>Protágoras ya no ve nada claro su planteamiento inicial</b>, y acepta ahora a regañadientes que si la virtud es o supone un conocimiento, si tiene algo de ciencia debe ser enseñable. Con esto se llega al final del diálogo, en el que </span><span style="font-size: large;">Protágoras se despide de buen grado y augura un buen futuro al antagonista que ha encontrado en
Sócrates.</span></span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: large;"><b>Corto </b>(apenas unas sesenta páginas), <b>brillante y estimulante</b>, este diálogo nos permite descubrir la perspicacia de Sócrates y la pretensión fatua de los sofistas.</span></span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: large;">Algunas versiones on-line de "Prótagoras":</span></span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span>
<i><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">-<a href="http://mestreacasa.gva.es/c/document_library/get_file?folderId=500013983369&name=DLFE-809939.pdf">http://mestreacasa.gva.es/c/document_library/get_file?folderId=500013983369&name=DLFE-809939.pdf</a></span></i><br />
<i><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">-<a href="http://www.filosofia.org/cla/pla/img/azf02009.pdf">http://www.filosofia.org/cla/pla/img/azf02009.pdf</a></span></i></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-91358664446561475422019-11-05T12:25:00.004+01:002020-01-12T22:37:10.238+01:00La Academia Antigua: Jenócrates<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLLnsuPGyKMuvnqWYcz6K0P9eslm9IJA-IyQ-CzbWOlLjiEKlt15sS6MFcaXFKPN623zyo2TKXsDTk6iUYzc548hlX2-HWykwmc4F-qfBr1BQ8MmtBYsQHnHBf6QfAd_qebmnk/s1600/xenocrates.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="400" data-original-width="300" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLLnsuPGyKMuvnqWYcz6K0P9eslm9IJA-IyQ-CzbWOlLjiEKlt15sS6MFcaXFKPN623zyo2TKXsDTk6iUYzc548hlX2-HWykwmc4F-qfBr1BQ8MmtBYsQHnHBf6QfAd_qebmnk/s320/xenocrates.jpg" width="240" /></a></div>
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<b style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: x-large;"><br /></b>
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<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><b>Jenócrates</b></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">, nacido en el año 396 antes de Cristo, fue el sucesor de Espeusipo como escolarca de la Academia platónica, cargo en el que permaneció 25 años, hasta su muerte.</span></span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: small;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large; text-align: justify;">De él se dice que fue un fiel seguidor y discípulo de las doctrinas de su maestro, Platón. Fue con él durante su viaje a Sicilia, y al amenazar Dioniso con decapitar al gran filósofo ateniense, Jenócrates que deberían decapitarle a él primero.</span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"><b>Llevó una vida sencilla y austera</b></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">, rayana en la pobreza, y no era tan rápido de mente como otros alumnos de Platón, pero sí muy trabajador. Muchas veces el sudor suple al talento natural, o al menos permite que la carencia de este sea compensada.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">
</span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">Muy apreciado en su época, se dice que incluso el mismo Alejandro Magno le admiraba, y no dudó en brindarle cincuenta talentos por su trabajo. Escribió varias obras de filosofía (política, naturaleza, arte, etc.) y tuvo como </span><b style="font-family: georgia, "times new roman", serif; text-align: justify;">discípulos </b><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">a nada menos que </span><b style="font-family: georgia, "times new roman", serif; text-align: justify;">Epicuro</b><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">, </span><b style="font-family: georgia, "times new roman", serif; text-align: justify;">Crantor</b><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"> y </span><b style="font-family: georgia, "times new roman", serif; text-align: justify;">Zenón de Citio</b><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"> (no confundir con Zenón de Elea).</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: small;">
</span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">Jenócrates gustaba de hacer divisiones tripartitas dentro del mundo del pensamiento. Así, </span><b style="font-family: georgia, "times new roman", serif; text-align: justify;">dividió las filosofía en tres ramas: Lógica, Física y Moral</b><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">. Una de sus grandes apuestas fue dotar de contenido e importancia filosóficas a las doctrinas matemáticas, tratando de ver en ellas el conocimiento de las ideas platónicas. Hay una evidente tentativa de armonizar los números con el idealismo platónico. Como en los números está la esencia de las cosas, recogiendo la idea básica de Pitágoras de Samos, la unidad y la díada son los dioses que dirigen el mundo. El alma constituye un número que se mueve por sí mismo, y los números representan los distintos grados a través de los cuales Dios desciende del cielo a la Tierra.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: small;">
</span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">Aquí se ve una especie de mitología pitagórica. La <b>realidad </b>es para</span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"> Jenócrates una combinación, también tripartita, de <b>objetos</b> que pueden ser <b>percibidos</b>, otros que pueden ser <b>opinables y</b> finalmente otros que son verdaderamente <b>conocidos</b>. Del mismo modo, el <b>ser humano</b> se divide en tres partes: <b>mente</b>, <b>cuerpo </b>y <b>alma</b>. </span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">
</span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">Si Espeusipo, el escolarca anterior a Jenócrates, no admitía que el Bien pudiera estar en lo Uno, dado que eso hubiera supuesto que el Mal estuviera en lo Múltiple (y algo hecho por Dios no puede poseer el Mal), Jenócrates es mucho más audaz y asume que</span><b style="font-family: georgia, "times new roman", serif; text-align: justify;"> todos los seres</b><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">, dado que participan tanto del Uno como de lo Múltiple, </span><b style="font-family: georgia, "times new roman", serif; text-align: justify;">deben poseer o relacionarse de algún modo con el Mal</b><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"><br /></span>
<span style="font-size: small;">
</span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">Distinguía Jenócrates, como no podía ser de otra manera, </span><b style="font-family: georgia, "times new roman", serif; text-align: justify;">tres mundos</b><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">: el sublunar, el celeste y el supraceleste. Y en los tres coexisten criaturas buenas con malas. "Demonios" los hay por todas partes; algunos son buenos, otros malos. De este modo, Jenócrates podía explicar por qué los dioses realizaban malas acciones, así como que hubiera cultos fuera de la moral establecida. De este modo, las acciones perniciosas las llevarían a cabo los demonios malos, y los cultos "inmorales" serían ejecutados y dirigidos a los demonios malos.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: small;">
</span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">Sostuvo Jenócrates que incluso las partes irracionales del alma sobreviven pasada la muerte. Y es de destacar su </span><b style="font-family: georgia, "times new roman", serif; text-align: justify;">doctrina vegetariana</b><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"> (sin duda influida por las enseñanzas pitagóricas), según la cual se abstenía de comer carne y condenaba esas prácticas porque pensaba que al comer carne dominaría lo irracional sobre lo racional.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"><br /></span>
<span style="font-size: small;">
</span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">Jenócrates gustaba de analizar y estudiar especialmente el diálogo platónico </span><i style="font-family: georgia, "times new roman", serif; text-align: justify;"><a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2019/09/dialogos-de-platon-ii-timeo-i.html">Timeo</a></i><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">, obra a la que apreciaba mucho y comentaba siempre que podía. Según Diógenes Laercio, "como era sumamente modesto y enemigo del fausto, pasaba muchas muchas veces al día meditando, y aun destinaba, según dicen, una hora al silencio". Muestra de su frugalidad fue que, del dinero enviado para él por Alejandro Magno, se quedó con una pequeña parte y devolvió el resto, porque según dijo necesitaba de más reservas económicas aquel que debía mantener a tantas personas. </span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">
</span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; text-align: justify;">Jenócrates murió a la avanzadísima edad, para la época, de 82 años, un día del 314 antes de Cristo.</span></span><br />
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">
</span>elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-56806843339512431122019-11-04T19:34:00.003+01:002019-11-04T19:49:50.048+01:00La filosofía del lenguaje de Bertrand Russell (y III)<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEie81NztDhKluXJrrKjtrz0s9KFeJLc9cc3sahIwfVuGleYS0gnuMq7Mp80qHymhF4QMOE41lSkXNgekTx01qEkjhcmFERYkdwtyunoxSCue10xL9OYE3DiTy19u8ZgpolugQKT/s1600/nLZNM60v_400x400.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="400" data-original-width="400" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEie81NztDhKluXJrrKjtrz0s9KFeJLc9cc3sahIwfVuGleYS0gnuMq7Mp80qHymhF4QMOE41lSkXNgekTx01qEkjhcmFERYkdwtyunoxSCue10xL9OYE3DiTy19u8ZgpolugQKT/s320/nLZNM60v_400x400.jpg" width="320" /></a></div>
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<div style="text-align: justify;">
<b><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;">-Los hechos y la verdad</span></b></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-size: medium;">Recordemos que, según la teoría del significado de Russell, el significado de un nombre es la entidad que sustituye; el de un predicado sería la propiedad o la relación que implica y, finalmente, el significado de una oración el hecho que ella misma representa. Por tanto, aquí no hay la dupla <i>sentido/referencia</i> propia de Frege, como vimos en su nota respectiva. </span><span style="font-size: medium;">Por otro lado, respecto a la epistemología del propio Russell, él creía que el saber de la realidad que poseemos se puede reducir a un conocimiento por familiarización, un saber directo de los componentes que lo integran.</span></span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">En conjunto, lo que tenemos aquí es una <b>teoría atomista</b> (porque la realidad la configuran elementos últimos, y el lenguaje es susceptible de análisis hasta esos elementos finales) <b>y realista</b>, porque la relación que da su significado al lenguaje es de correspondencia entre este y la realidad, aunque esta última sea independiente del propio lenguaje. Esta relación se vertebra a través del hecho de nombrar y del hecho de representar. "Nombrar es la relación propia de los nombres, mientras que representar es la que acometen los enunciados", como comenta Eduardo de Bustos, cuya obra seguimos aquí (</span><i style="font-family: georgia, "times new roman", serif; font-size: large;">Filosofía del Lenguaje</i><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">, UNED, 2006, Madrid)</span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">
</span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Pero los enunciados no nombran, sólo representan. Cada hecho del mundo está en relación con dos enunciados, uno de los cuales es la pura negación del otro. <b>Los hechos son los que definen la verdad de las proposiciones</b>, pero no son verdaderos ni falsos por sí mismos. Sólo son verdaderas o falsas las creencias, y todo enunciado es el objeto de una creencia, puesto que toda creencia consiste en afirmar que un enunciado es verdadero o falso. ¿Y qué hace verdadero a un enunciado? La existencia de un hecho.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>-La crítica de F. J. Strawson a la teoría de las descripciones de Russell</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Esta crítica de Strawson puede resumirse en una conclusión devastadora para alguien como Bertrand Russell, que estaba convencido de la estructura lógica del lenguaje natural. Lo que afirmó Strawson fue lo siguiente.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><b>No hay en el lenguaje natural una lógica exacta</b>. En otras palabras, no hay en las expresiones que se utilizan de ordinario nada que logre asignarles una forma lógica que se mantenga inalterable y constante en todo contexto ni en todo uso. Y esto porque hay oraciones en el lenguaje común que son significativas, pero a las cuales no es posible darles un valor de verdad.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Strawson emprende su crítica rechazando que existan <b>nombres lógicamente propios</b>, porque no los hay en el lenguaje natural, no hay categorías lingüísticas que aseguren sin duda la existencia siempre de un referente. Las oraciones no son verdaderas o falsas, sino que se emplean para hacer afirmaciones que sí son, estas últimas, verdaderas o falsas.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Para que en una oración se le asigne un valor veritativo se requieren de unas condiciones, entre las cuales está que el uso realizado de la expresión sea correcto, o sea, que en ese uso a la expresión nominal le corresponda una referencia.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">No se trata ya de que las descripciones que cumplen la función de sujeto en algunas oraciones puedan tener una referencia vacía e inexistente, sino de que todas las expresiones que valen como sujetos de las oraciones provocan ese mismo problema.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Strawson insiste en que las oraciones pueden tener significado son que sean enunciados (sin que seas verdaderas o falsas). Una oración tendrá significado con la condición suficiente de si es posible imaginar una circunstancia en la que su uso tendría como resultado un enunciado verdadero o falso. Por tanto, será en esas condiciones, cuando la oración se usa, y se hace un enunciado con ella, cuando puede decirse al fin que la oración adquiere en sí misma una referencia.</span></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-23712535627562031702019-10-24T22:27:00.000+02:002019-10-24T22:27:38.927+02:00<img alt="Resultado de imagen de paul feyerabend" src="https://www.madrimasd.org/blogs/universo/wp-content/blogs.dir/42/files/159/o_Feyerabend.JPG" /><br />
<div>
<br /></div>
<div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">"<b>Los maestros emplean las calificaciones y el miedo al fracaso para moldear el cerebro de los jóvenes hasta que pierden la última gota de la imaginación que podrían haber poseído</b>"</span></div>
<div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Paul K. Feyerabend (1924-1994)</span></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-86734534388920602602019-10-24T22:01:00.000+02:002020-01-12T22:37:10.216+01:00La Academia Antigua: Espeusipo<img height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDnsIZ4wN4-6D0DChuKR9Q9heB9GaQQl58S7GfGix7kP7Y2oklvSjTSB8hLDYuMycmv29dGbkULRwWnn8v72-gDedfJghKi6VZKbzW2Q2WkzXvOZqG4gYxoLtDK6lvZbtPaJPb4Q/s320/Espeusipo.jpg" width="215" /><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;">Ya vimos tiempo atrás algunas características generales y los miembros principales de la <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2013/03/la-academia.html">Academia platónica</a>, en sus distintas etapas. En esta nota vamos a conocer un poco mejor a uno de los más importantes miembros de la <i>Academia Antigua</i>.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;">-Espeusipo:</span></b></div>
<div style="text-align: justify;">
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;"><br /></span></b></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;">Fue el primer escolarca, que entró a dirigir la Academia justo tras la muerte de Platón, acaecida en -348. Se dice que Aristóteles, al conocer este hecho, abandonó Atenas, puede que molesto por no haber sido nombrado él mismo el sucesor del gran ateniense. Sin embargo, Aristóteles era macedonio; y los no atenienses tenían vedados cargos de ese calibre, por lo que de todos modos no hubiera podido dirigir la Academia de su maestro.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;">Espeusipo era sobrino de Platón, hijo de una de sus hermanas. Apenas tenemos de él más que unas breves referencias de Aristóteles, y en general las obras de los escolarcas en ningún caso nos han llegado completas.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;">Uno de los objetivos de Espeusipo fue desarrollar y aplicar las enseñanzas dadas por su tío en los años finales de su vida. Pero Espeusipo modificó el dualismo platónico, el relativo al conocimiento-percepción, de modo que para él la realidad consistía en números matemáticos. De hecho revitalizó, por así decir, la teoría de los números pitagórica, haciéndola equiparable en relevancia a la teoría platónica de las ideas.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Hay varios tipos de sustancias y las esencias "proceden de la Unidad y la Multiplicidad absolutas, y ponía el Bien al final del proceso del devenir y no al inicio" (F. Copleston, <i>Historia de la Filosofía</i>, vol. 1). Y esto es así porque el Bien estará en aquellos seres que han alcanzado cierto desarrollo.</span></span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">La Razón o Dios es uno de los seres animados o substancias que proceden del Uno, a quien seguramente Espeusipo identificaba con el Alma del mundo. Las almas humanas, por su parte, son igualmente inmortales. Fue este autor crítico con ciertos diálogos platónicos, y en especial con el <i>Timeo</i>, del que decía que no recogía el relato de la creación tal cual sucedió, sino sólo como una forma de exponerlo, para que se pueda comprender, porque en realidad el mundo no ha tenido un comienzo en el tiempo. En armonía con otros pensadores de la época, o incluso algunos anteriores (como Anaxágoras de Clazómenas, por ejemplo), identificó o asimiló a los dioses con fuerzas físicas, opinión que le valió la acusación, tan frecuente, de ateísmo.</span></span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Según Diógemes Laercio, Espeusipo escribió algunos diálogos propios. Era macedonio (como su compañero en la Academia, Aristóteles), de corte aristocrático y al parecer seguidor y defensor de Dión. En la época de este escolarca fueron importantes las discusiones y estudios acerca de las figuras discursivas empleadas, de tal modo que en tiempos de Espeusipo se dio construcción y forma a estas figuras, las cuales son muy conocidas actualmente (sinonimia, homonimia, paronimia, etc.).</span></span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: medium;"><br />
Se cuenta que en vida le propuso a un rico, que amaba a una mujer fea, que si le daba diez talentos le conseguiría otra más hermosa para que fuera más feliz. Según Plutarco, Espeusipo murió de piojos, pero según otras fuente se suicidó. En todo caso, murió a los 47 años, en el 339 antes de Cristo.</span></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-86539122109578281002019-10-15T12:44:00.000+02:002019-10-15T13:01:01.714+02:00Michel de Montaigne<img alt="Resultado de imagen de michel de montaigne" height="200" src="https://avalon.fabiosacdn.com/image/bc07f246-8504-404b-aa87-7292846f3a88.jpg" width="400" /><br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span>
<br />
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Si hay un hombre que encarna el retorno del hombre a sí
mismo, dejando atrás la esencia medieval para iniciar el cambio renacentista,
ese es <b>Michel de Montaigne</b> (1533-1592).<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Nacido en el castillo de Montaigne, un pueblecito francés
cercano a Burdeos, Michel fue educado por su padre con un método pedagógico en
el que se excluía toda coacción y rigor. Siendo muy pequeño fue enviado a vivir
con gente pobre para que supiera y conociera lo que era la dura vida campesina.
No aprendió el francés hasta los ocho años, siendo el latín su lengua materna;
incluso los empleados del castillo tenían prohibido dirigirse al niño en
francés porque su padre deseaba que su hijo hablase el latín con toda
naturalidad. Gracias a la buena posición social y económica de su padre, Michel
pudo estudiar en el <i>Collège de Guyenne</i> de la ciudad francesa mencionada arriba.
Obtuvo el grado en Derecho y fue consejero del Parlamento de Burdeos (1557).
Sus trabajos como magistrado se prolongaron hasta 1566. Finalmente, a los 38
años, decidió retirarse a su castillo para dedicarse al estudio.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Naturalmente, el fruto de ese estudio y el análisis de sí
mismo, que es el auténtico interés de Montaigne (la "pintura del yo"),
cristaliza en sus monumentales <b><i>Ensayos</i></b>, título con el que se menciona por vez
primera este tipo de textos, y de los que Michel fue su creador. Su idea es
desnudarse, describirse sin máscaras ni artificios sino tal y como es. Sin
embargo, los primeros ensayos de su obra son simples recopilaciones de
sentencias y hechos procedentes de otros escritores, antiguos y modernos. Sería
con el avance de sus propias reflexiones y con el andar de las páginas con las
que la personalidad de Montaigne y su estilo irían poco a poco apareciendo. Cuando en 1580
publicó los dos primeros libros de su obra inició un viaje por Suiza, Alemania
e Italia, permaneciendo en la capital de este país todo el invierno. Al ser
nombrado alcalde de Burdeos tuvo que regresar a su país. En 1582 y 1588 se
publicaron sendas ampliaciones de los <i>Ensayos</i>, y Montaigne aún preparaba una
cuarta cuando le sobrevino la muerte, en septiembre de 1592.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Los <i>Ensayos </i>deben ser vistos no como pruebas o tentativas
sino como experiencias. La intención de su autor es recoger, en palabras de
Nicola Abbagnano, "las experiencias humanas expresadas en los escritos de
los autores antiguos y modernos y ponerlas a prueba en relación con sus propias
experiencias". La obra de Montaigne no es una filosofía sistemática
desarrollada en un cuerpo de doctrinas, sino un ejercicio de verdadero
filosofar: la meditación personal, dirigida a tratar todos los asuntos humanos,
y ese constante dialogar con los demás y la comparativa entre sus vivencias y
las propias del pensador francés forman el esqueleto de su proceder filosófico.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Siempre se ha dicho que Montaigne sigue el estoicismo y el
escepticismo, pasando del primero al segundo. Bien, es cierto, pero lo hace con
un ánimo de síntesis, de seleccionar lo mejor de ambas posturas para acabar
perfilando una orientación socrática, donde logra su equilibrio. Es decir, del
estoicismo comprende el estado de dependencia del hombre respecto a las cosas;
del escepticismo aprehende el modo para liberarse de esa dependencia, para que
a las cosas les demos su valor justo, pero no más que eso. En la torre de su
castilla se advertía el lema "¿qué sé yo?", en clara referencia a las
enseñanzas socráticas.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Hay que valorar el conocimiento sensible, el obtenido por
medio de los sentidos, en igual justa medida. Es importante, porque sin él no
seríamos más que una piedra. Pero el conocimiento sensible "carece de
cualquier criterio seguro para discernir las apariencias verdaderas de las
falsas". <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">En sus últimos <i>Ensayos </i>Montaigne se vuelve cada vez más
hacia sí mismo. El filosofar es ya un continuo experimentarse, como señala en
el tercer libro de su obra. La existencia en sí misma es un problema, un
problema abierto siempre y para siempre, que nunca concluye y que, por ello
mismo, debe estar siempre en autoanálisis constante. Este modo de filosofar,
que trata de dirigirse a la humanidad del yo, y que desde él comprende su
singularidad (y, por otro lado, la universalidad de la condición humana, para
todo ser humano, por sencilla y humilde que sea su vida), es el germen de la
filosofía moderna y, a juicio de Abbagnano, "el fruto más maduro del
Humanismo". Y es un proceder que seguirá, no mucho después, René Descartes
en su <i>Discurso del Método</i>.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Montaigne acepta el hombre como es, con sus vilezas y grandezas.
No puede uno elevase por encima de la humanidad, pues "no puede ver más
que con sus ojos ni sujetar nada que huya de ser su presa". El hombre, en
fin, debe tratar de ser, sin más, hombre. No tiene sentido plantearse y
fantasear acerca de una condición mejor y más alta de la que el hombre
realmente ya posee. Hay que aceptarnos, aunque ello no excluye el mejorarnos. </span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">También hay que aceptar la muerte. "Quien teme sufrir, sufre ya por lo que
teme", nos dice Montaigne, de modo que quien enseñe a los hombres a morir,
les está enseñando igualmente a vivir. Llegará nuestra hora, para todos, y si
somos conscientes y lo aceptamos, llegado ese momento, aceptaremos perder la
vida sin queja. Y ese pensamiento y consciencia acerca de la muerte no vuelve
la vida más triste, sino más apreciable y gozosa: "A medida que la
posesión de la vida se hace más breve, hace falta que yo la haga más profunda y
plena". Aceptar la muerte supone y cataliza un impulso por vivir, y para
vivir mejor.</span></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">
</span><br />
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">No hay mejor forma de terminar esta nota que por medio de
las palabras de Nicola Abbagnano, cuyas páginas dedicadas a Montaigne en su
<i>Historia de la Filosofía</i> (<a href="https://sites.google.com/site/aportacionesfilosoficas6sec/abbagnano-n-historia-de-la-filosofa-volumen-2-hora-espaa-1994">Volumen 2</a>) hemos seguido aquí: "Si la primera
llamada a la conciencia de su subjetividad individual e histórica lleva al hombre,
en el Renacimiento, a la exaltación de su estado privilegiado, el profundizar
esta conciencia en su continuo experimentarse y ponerse a prueba, lo conduce al
reconocimiento de sus límites y a la lúcida aceptación de sí mismo. Montaigne
representa precisamente esta segunda fase del Humanismo renacentista; y a
través de esta segunda fase el Humanismo desemboca en la filosofía moderna y
abre camino a Descartes y a Pascal".</span></div>
</div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-62750079050165011362019-10-06T00:36:00.000+02:002019-10-15T12:59:37.463+02:00La filosofía del lenguaje de Bertrand Russell (II)<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEih95E9qU8nKRNUBOZrrN1D1m04Px9e8Z3Z-mUsAjqbTh55WesfnxY2W0WhKgLasoVgt8TedfSaiGxJ3JB54EfNo_XPUGx3UBGrk_T_qLp6y_u5Wva328ru36_3c0PlP-wkQD8W/s1600/1443555370.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="640" data-original-width="450" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEih95E9qU8nKRNUBOZrrN1D1m04Px9e8Z3Z-mUsAjqbTh55WesfnxY2W0WhKgLasoVgt8TedfSaiGxJ3JB54EfNo_XPUGx3UBGrk_T_qLp6y_u5Wva328ru36_3c0PlP-wkQD8W/s320/1443555370.jpg" width="225" /></a></div>
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Prosiguiendo la descripción de la <i>Filosofía del Lenguaje</i> de nuestro autor, Bertrand Russell, hoy analizaremos cómo son sus teoría acerca de los <i>Nombres </i>y las <i>Descripciones</i>.</span></div>
<span style="font-size: medium;"><br /></span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><b>-Nombres</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Aquí Russell parte de dos tesis: la tesis <i>semántica </i>nos dice que los nombres 'auténticos' (los propios) refieren a entidades particulares. Esto parece bastante obvio. La tesis <i>epistemológica</i>, por su parte, asegura que si queremos conocer a estas entidades particulares referidas por los nombres hay que hacerlo por familiarización. Esto también es fácil de comprender: un nombre. cuyo significado es en efecto un particular, sólo podrá aplicarse a otro que sea conocido por el sujeto que habla. Rusell lo resume así: "No es posible nombrar nada de lo que no se tenga un conocimiento directo" (<i>La filosofía del atomismo lógico</i>).</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Entendamos antes qué es un <i>particular</i>. Un particular es una entidad simple de la cual no sabemos nada realmente. La gran mayoría de los objetos de la vida diaria no son entidades simples, sino complejas. Russell sostiene que estos objetos son <i>colecciones de datos sensoriales</i>, los cuales a su vez son los objetos últimos de nuestra experiencia. Así, pues, conocer un objeto ordinario será describirlo, porque partimos de los datos sensoriales para constituirlo como parte o proceso de su conocimiento. Para aprehender un libro, no se nos es dado un estado mental que permita lograrlo directamente; al contrario, el conocimiento del libro es producto del conocimiento de verdades. Pero el libro en sí, la cosa real que es el libro, "no nos es, en sentido estricto, conocida en absoluto".</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Por tanto, las expresiones que hacen referencia o denominan objetos no llegan a ser verdaderos nombres propios, puesto que no están referidas a entidades simples, sino a complejas. Así, pues, es necesario diferenciar entre nombres propios ordinarios (que denominan entidades complejas) y los nombres lógicamente propios (que refieren entidades directamente conocidas). </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Russell sostenía que las expresiones de este segundo tipo sólo pueden ser empleadas por el hablarte si se refiere a sus propios datos sensoriales, en presencia de lo que sea que los provoca. Pero esos datos son, para otro individuo, innaccesibles por completo (él tendrá sus propios datos sensoriales), de modo que parece que la conclusión a la que se llega es que las expresiones de un hablante sólo él las puede conocer realmente, distinguiéndose del significado que las mismas expresiones tengan para otro hablante.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><b>-Descripciones</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Según Russell, la mayor parte de las expresiones que empleamos son incompletas (es decir, no tienen significación por ellas mismas). Para <a href="https://apuntesdefilosofa.blogspot.com/2015/02/frege-y-su-filosofia-del-lenguaje-i.html">Frege</a>, antes que Russell, como ya vimos, el sentido y la referencia de un enunciado son independientes (en cierto modo); pero, para Russell, si un enunciado es significativo entonces ello es suficiente para que podamos saber su es un enunciado verdadero o falso. No existen los enunciados con sentido que no posean referencia. </span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">También difiere Russell respecto a Frege en que la mayor parte de las veces la estructura gramatical y la lógica no coinciden.</span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Russell sostenía que si afirmamos que cualquier expresión descriptiva funciona como nombre y siempre denota algo provoca dos inconvenientes fastidiosos: no permite diferenciar entre enunciados como "el autor del Lobo estepario es Hesse" y "Hesse es Hesse", ya que como el enunciado remite a un individuo, se puede sustituir ese sujeto por otro que posea una correferencia. Y, también, se está violando el principio de <i>tercio excluso</i> (es decir, el que afirma que o bien una oración es verdadera, o lo es su negación) en el caso de aceptar que haya expresiones nominales que no posean referencia</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Como señala Eduardo de Bustos (<i>Filosofía del Lenguaje</i>, UNED, 2006, a quien seguimos aquí), "una consecuencia interesante de la teoría de las descripciones de Russell es que las oraciones afirmativas... implican la existencia de lo referido por sus expresiones nominales sujeto"; por tanto, cuando un hablante afirma un enunciado ("hoy hace sol y es miércoles") se compromete con la existencia de lo referido por la expresión que ha empleado. Los "supuestos existenciales", en el caso de Russell, forman parte del significado de las oraciones y deben ser reflejados explícitamente si se quiere describir la estructura lógica o semántica de las mismas.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">La teoría de las descripciones russelliana tiene dos consecuencias: por un lado, todo sintagma determinado está fuera del grupo de las expresiones nominales: ni designan componentes auténticos ni tienen una referencia directa; por otro, se prescinde de entidades arbitrarias; así, lo único que es fundamental aceptar como existente son, no categorías ontológicas extrañas, sino únicamente los componentes auténticos de lo que el enunciado refiere. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Por tanto, ya tenemos los elementos y las entidades que configuran los hechos y el mundo: los datos de los sentidos y las propiedades y las relaciones.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">En la última nota de esta serie dedicada a la filosofía del lenguaje de Russell comentaremos unas líneas acerca de los Hechos y la Verdad y mencionaremos las críticas a las que se sometió su teoría de las descripciones.</span></div>
elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-36310449.post-90025650340347176142019-10-05T21:28:00.001+02:002019-10-05T21:30:00.607+02:00<img alt="Resultado de imagen de quien tiene un porqué para vivir puede soportar cualquier cómo cita" src="http://23.253.41.33/imagen_nota/826518_UFAVJDRI_7.jpg" height="320" width="400" /><br />
<br />
<b>"Quien tiene un por qué para vivir puede soportar cualquier cómo"</b><br />
<br />
Friedrich Nietzsche (1844-1900)elHermitañohttp://www.blogger.com/profile/02557060842092567095noreply@blogger.com0